MyTO

Merrill

Hace años que estoy inscrito en el Club Natación Barceloneta, el Real Madrid de las aguas, al que voy a nadar tres o cuatro veces por semana. Las instalaciones ocupan lo que fueron los Baños de San Sebastián, cuya construcción, coincidiendo con la Exposición Universal de 1929, avivó en Barcelona el sueño de una ciudad risueña, lúdica, recreativa; el reflejo mediterráneo de la Bella Easo. De hecho, los baños fueron concebidos como un casino-balneario que, si bien nunca llegaría a funcionar como tal, acogió en sus salones algunas de las fiestas más canallas de la burguesía local. Cuentan las crónicas que Josephine Baker actuó en una de aquellas celebraciones, aunque de hacer caso a todos los artículos que señalan que en tal o cual bar de Barcelona actuó Josephine Baker, estaríamos ante el sosia femenino de Hemingway, que bebió en todos los bares de Getafe. 

Opinión
  • Me fogueé en la revista El Ciervo a principios de los noventa y, tras un largo periodo dedicado a la edición en sus múltiples facetas, fundé una editorial, Tentadero, que fracasó por todo lo alto, dejando tras de sí cuatro obras hoy inencontrables, entre las que destaca Ebro/Orbe, de Arcadi Espada. Retomé el periodismo como redactor jefe del periódico Factual, semillero de modernidad que no resistió la crisis de 2009. Soy autor del dietario ‘Libre directo’ y, con Iñaki Ellakuria, de ‘Alternativa naranja’, crónica de la génesis y ascenso de Cs. Desde 2020 vivo en Madrid, terra d’acollida.

Hace años que estoy inscrito en el Club Natación Barceloneta, el Real Madrid de las aguas, al que voy a nadar tres o cuatro veces por semana. Las instalaciones ocupan lo que fueron los Baños de San Sebastián, cuya construcción, coincidiendo con la Exposición Universal de 1929, avivó en Barcelona el sueño de una ciudad risueña, lúdica, recreativa; el reflejo mediterráneo de la Bella Easo. De hecho, los baños fueron concebidos como un casino-balneario que, si bien nunca llegaría a funcionar como tal, acogió en sus salones algunas de las fiestas más canallas de la burguesía local. Cuentan las crónicas que Josephine Baker actuó en una de aquellas celebraciones, aunque de hacer caso a todos los artículos que señalan que en tal o cual bar de Barcelona actuó Josephine Baker, estaríamos ante el sosia femenino de Hemingway, que bebió en todos los bares de Getafe. 

A partir de los años sesenta del siglo XX, los baños entraron en una lenta e inexorable decadencia, cual si fueran un episodio a contramano de cualquier indicio de progreso, más propio del cine mudo que del fragor preolímpico. En junio de 1988, al poco de que expiraran los cien años en que se fijó la concesión administrativa del Puerto de Barcelona a la familia Ribalta, promotora de los baños, éstos fueron derruidos, y en su lugar se alza el CNB. Desde hace años, decía, nado en esas piscinas, y es la única lealtad para conmigo que he sabido cultivar, junto con el gazpacho y no recuerdo qué, tratando, siempre en vano, de parecerme a Burt Lancaster. Nunca a Michael Phelps.