El sueño imposible de cambiar la Ley Electoral
Los argumentos esgrimidos por Juan Carlos Girauta e Irene Montero hoy tras una reunión de ambos grupos parlamentarios, los de Ciudadanos y Podemos, son impecablemente democráticos, , y entre ambas formaciones parece que en esta materia hay absoluto acuerdo y sintonía.
Al calor de las encuestas, Ciudadanos y Podemos tratan de sumar votos en el Congreso para poder sacar adelante una reforma de la Ley Electoral, buscando un sistema más proporcional, y pretenden convencer al PSOE para intentar aprobarla antes de que termine 2018. En el Congreso hay una subcomisión abierta para estudiar esta reforma, y es entonces cuando de existir acuerdo, se podrá elevar la propuesta, que requiere de mayoría absoluta para salir adelante.
Creo que va a ser un esfuerzo elogiable, pero vano. PP, PSOE y los nacionalistas no van a estar por la labor, porque a ellos con la ley D´Hont les ha ido muy bien, y ha habido muchas ocasiones incluso más favorables para sacar la reforma adelante a lo largo de la historia reciente, pero los partidos mayoritarios nunca han querido ni hablar del tema. Es el típico asunto que se enarbola como bandera cuando están en la oposición y del que se olvidan nada más ganar y llegar al Gobierno.
A ver cómo explica ahora el PSOE de Pedro Sánchez no apoyar esta reforma que impulsan Ciudadanos y Podemos. El PP lo tiene relativamente fácil, pero Sánchez va a tener que hacer malabarismos para articular argumentos de peso para negarse, si atendemos a su teórico afán regeneracionista que vende cada semana en sus mítines y actos partidistas. Pero ya se sabe que a los partidos clásicos este juego no se les da mal, están muy acostumbrados a este juego, lamentablemente, y claro, así les ha ido hasta la fecha.
Los argumentos esgrimidos por Juan Carlos Girauta e Irene Montero hoy tras una reunión de ambos grupos parlamentarios, los de Ciudadanos y Podemos, son impecablemente democráticos, y entre ambas formaciones parece que en esta materia hay absoluto acuerdo y sintonía, otra cosa son los asuntos económicos, sociales y especialmente territoriales, en donde la distancia entre ambas formaciones es sideral.
Le Ley Electoral es evidente que hay que reformarla, pero mientras no haya un cambio en las cúpulas de PP y PSOE va a ser que no. No hay posibilidad. A ellos no les conviene, por más que sea un sistema injusto que hace que no valgan lo mismo los votos en todos los lugares de España. Que se lo digan a Izquierda Unida, quizá la formación que más ha padecido la ley D´Hont. Es un sueño imposible con los partidos de toda la vida.