Bipartidismo
La diputada del PP Celia Villalobos aparecía este lunes en Espejo Público de Antena 3 muy indignada con el nuevo Gobierno de Pedro Sánchez. Como una independentista cualquiera, hablaba de «gobierno ilegítimo». Como si, en democracia, la legalidad y la legitimidad no fueran lo mismo. Como si en un sistema parlamentario no fueran los diputados, tejiendo pactos, quienes eligen a los presidentes. En definitiva, como si fuera una Marta Ferrusola cualquiera, que se sintió desahuciada cuando llegó el primer gobierno del tripartido.
La diputada del PP Celia Villalobos aparecía este lunes en Espejo Público de Antena 3 muy indignada con el nuevo Gobierno de Pedro Sánchez. Como una independentista cualquiera, hablaba de «gobierno ilegítimo». Como si, en democracia, la legalidad y la legitimidad no fueran lo mismo. Como si en un sistema parlamentario no fueran los diputados, tejiendo pactos, quienes eligen a los presidentes. En definitiva, como si fuera una Marta Ferrusola cualquiera, que se sintió desahuciada cuando llegó el primer gobierno del tripartido.
Lo que la indignación de Villalobos no le deja ver es que Pedro Sánchez ha resucitado el bipartidismo. El centroderecha del PP tiene quizás la última oportunidad de reinventarse a costa de Ciudadanos. Sánchez ya ha hecho su parte. Está por ver si ellos son capaces de generar ilusión, distanciarse de la corrupción e implicarse en Europa con la crisis de refugiados. La mayor crisis que afronta el viejo continente desde la Segunda Guerra Mundial. España será uno de los protagonistas y mayores activos del europeísmo ante el aumento del euroescepticismo. Y ello depende de un centroderecha y un centroizquierda fuertes y comprometidos con los valores de la Unión Europea.
