Euro-manual de supervivencia bélica y climática
«Prepare un kit de supervivencia de 3 días con ropa de calor y frío extremo: aún no hemos decidido si asustarle con el calentamiento global o con el invierno nuclear»

Kit de supervivencia. | Archivo
Después de publicar nuestras recomendaciones en caso de que nos pille una pandemia en mitad de una guerra (que puede leer aquí), la Unión Europea les ofrece un manual de supervivencia por si la guerra se junta también con las catástrofes del cambio climático. Los enemigos son muchos (Rusia, China, Irán, Corea del Norte) así como los posibles cataclismos (terremotos, tsunamis, huracanes, sequías). No es exactamente la globalización feliz y el «fin de la Historia» que le prometimos al ingresar en la UE, pero la verdad es que tampoco les dimos opción de comprometernos a nada ni votar nada.
¡Valore este documento! Redactarlo nos ha costado deforestar una parte del Amazonas para poder reunirnos allí con nuestra flota de aviones y limusinas. Hemos invitado a las grandes multinacionales de la «transición ecológica» y las hemos reunido con las empresas del complejo militar-industrial. No ha sido difícil, porque en muchos casos son las mismas: Siemens tan pronto monta la Luftwaffe como una turbina eólica, Tesla y Chevron por la mañana hacen baterías eléctricas sostenibles y por la tarde atienden sus contratos del Pentágono, BlackRock invierte en biocombustibles que luego propulsan los misiles y aviones de las empresas Raytheon y Lockheed Martin (cuyo principal accionista es BlackRock).
Habrá gente a la que le parezca raro que los mismos millonarios que hablan de salvar el planeta ganen dinero apostando por destruirlo. No haga caso de esa gente: son desinformadores. En lugar de buscar culpables en las altas esferas, mírese al espejo. ¿Habría agujero en la capa de ozono si usted no fuese tan derrochador, contaminante y consumista? Tampoco estaría Rusia a las puertas de invadir toda Europa si usted se hubiese dado menos duchas y cocinase menos comidas al día, pues con sus gastos energéticos ha estado financiando a Putin. De alguna forma es usted el culpable de todo esto, así que sea humilde y obedezca las siguientes instrucciones:
1.- Prepare un kit de supervivencia de 3 días con ropa de calor extremo. Y prepare otro kit con ropa de frío extremo. Aún no hemos decidido si decantarnos por el miedo al calentamiento global o al invierno nuclear. En el peor de los casos, un invierno nuclear derivado de una guerra atómica a gran escala podría servir para paliar el calentamiento global. ¡No hay mal que por bien no venga! Lo mismo vale decir sobre la reducción de la población: dado que muchos de ustedes son tan egoístas que se empeñan en vivir más, tener hijos y no eutanasiar a sus mayores, la guerra global podría ser una buena solución al exceso demográfico. No hay recursos para todos, especialmente para ustedes que no son nadie.
2.- Tenga comida en el kit. Pero recuerde que no recomendamos ni carne ni vino ni cereales ni atún ni cerveza ni paté ni leche de granja ni una larga lista de alimentos que puede consultar en nuestra web -¿ha probado nuestras nuevas recetas con insectos?-. Tenga agua embotellada, pero evite el peligro contaminante que son las botellas de plástico (especialmente si el tapón se separa). Necesitará también una cocinita de gas, pero recuerde que el gas lo tenemos sancionado. Y algo para defenderse, pero no olvide que tener armas en el domicilio está prohibido. Guarde artículos de higiene femenina, aunque no esté nada claro qué es o qué no es una mujer. Y dinero en efectivo, pero esté dispuesto a eliminarlo cuando venga el euro digital. Sabemos que estas instrucciones pueden parecer contradictorias, pero piense que tenemos que mantener a la vez varias histerias colectivas y no siempre van a cuadrar todas a la perfección.
3.- Una vez hecho el kit para 72 horas, en vista de la lenta reacción al covid o a la dana, le recomendamos que prepare más bien un kit para 72 días. Es más, idealmente, vayan buscando un kit de supervivencia para 72 años, para buscarse solitos las castañas hasta que lleguen a la edad de jubilación y se puedan morir. Resulta agotador tener que financiarles 72 años de educación, seguridad social y pensiones. ¡Y la huella de carbono que tienen!
«Ustedes, los ciudadanos, ¿dónde estaban? ¿A que no tenían en casa preparados sus geles hidroalcohólicos en 2020, ni ahora sus kits, ni se habían leído nuestros manuales? Pues ya va siendo hora de que asuman sus responsabilidades»
4.- Tenga siempre el kit en su casa, aunque no tenga casa en propiedad. Haga acopio de materiales básicos, aunque el precio de la cesta de la compra no le permita ni llegar a lo necesario para su día a día. Tenga también un botiquín con todo el lote de medicamentos, aunque los tratamientos que de verdad necesita no se los cubra la seguridad social. Compre pilas y baterías y linternas y generadores, aunque no pueda ni pagar la factura de la luz de este mes. ¿O acaso tenemos culpa de la mala situación nosotros, los gobernantes y empresarios? Si quieren culpar a alguien, ahí tienen al «virus chino» o a la «guerra de Putin».
5.- En caso de guerra nuclear, tenga preparadas sus pastillas de yodo y algo de madera y cartón (¡reciclado!) para improvisar un refugio. No tenga dudas de que con eso se salvará: si creyó que la mascarilla le protegía de algo en mitad de una playa, de un bosque o dentro de su propio coche, entonces también podrá creer en esto.
6.- Prepárense para impredecibles e inexplicables crisis climáticas. Por la necesidad de rearmarse y obtener minerales estratégicos y tierras raras vamos a reabrir minería, taladrar las entrañas de la tierra, llenar de mierda el mar y poner en órbita basura espacial, así que nunca se sabe lo que puede pasar. Está claro que el cambio climático está causado por el ser humano, pero no queda claro que esté causado por estas actividades nuestras y no porque usted no separa bien en los contenedores del reciclaje.
7.- Es posible que haya grandes ciberataques. Por algún motivo suelen afectar al ministerio de seguridad social, retrasando y anulando el ingreso mínimo y otras prestaciones. Rara vez ha sido dañada la Agencia Tributaria, por lo que podrá seguir pagando impuestos sin miedo. También es muy posible que los ciberataques enemigos acaben con medios de comunicación disidentes y con las redes sociales de quienes no sigan estas instrucciones…
8.- Si finalmente llega la guerra, es necesario abordarla con una perspectiva ecologista. Lo de Dios y la patria está ya muy anticuado y es cosa del enemigo: esté dispuesto a dar su vida por la Gaia Ciencia y la Pacha-mama. Las raciones de comida militar incluirán una opción vegana, de forma que los ciudadanos más compasivos puedan tener el alimento necesario para exterminar sin piedad al enemigo. Busque formas más sostenibles de combatir: apague siempre que pueda las luces en su trinchera (esto además le ayudará a no ser bombardeado). Pruebe a llevar el tanque en punto muerto y acabe con el enemigo sin gastar proyectiles, aplastándole con las orugas del vehículo. Y recoja siempre los casquillos de bala y las espoletas de granada para no ensuciar el campo de batalla. Los cadáveres de sus compañeros puede dejarlos abandonados: son biodegradables.
9.- No se preocupe: la UE le ofrecerá cursillos de preparación para la guerra, que se añadirán a los que ya impartimos habitualmente. Tras las ya clásicas charlas contra el maltrato animal y la violencia machista pondremos la de quemar el ganado del enemigo y violar a sus mujeres. Tras la tradicional charla contra el racismo habrá otra nueva: «Muerte a los malditos africanos, latinos y asiáticos de los B.R.I.C.S.».
10.- Recuerde que todas estas medidas buscan empoderarle, hacerle resiliente y mejorar su autosuficiencia. Así que calle, obedezca y dé las gracias. Últimamente hay mucho populista preguntando dónde estábamos los poderosos cuando han ocurrido los desgracias, por qué los políticos estaban de comilona y los capitalistas haciendo trabajar a destajo a sus repartidores. Pero y ustedes los ciudadanos, ¿dónde estaban? ¿A que no tenían en casa preparados sus geles hidroalcohólicos en 2020, ni ahora sus kits, ni se habían leído nuestros manuales? Pues ya va siendo hora de que asuman sus responsabilidades. Y si necesitan ayuda, que la pidan.