The Objective
Santi González

Sánchez íntegro, ejemplar y transparente

«Puede que en el futuro se acabe acuñando a modo de frase hecha la expresión ‘tener más recorrido que Begoña ante el juez’, aunque no será un modelo de precisión»

Opinión
Sánchez íntegro, ejemplar y transparente

Ilustración de Alejandra Svriz.

El Consejo de Ministros (y Ministras, por supuesto) celebrado ayer dio un paso impresionante hacia la ejemplaridad en la gestión. El candidato de Sánchez a presidir la Comunidad de Madrid, que es al mismo tiempo el candidato de Begoña a romperse los cuernos contra el rompeolas de casi todas las Españas que es Isabel Díaz Ayuso, resumía así lo aprobado ayer en el Gobierno: «Debemos tomar medidas ambiciosas y ejemplares en materia de transparencia, integridad, rendición de cuentas, participación ciudadana y apertura institucional. Porque ganar confianza es ganar democracia».

Aclaremos que Bego le tiene cierta inquina desde que trascendió la noticia de que, durante la crisis socialista del 16, trató de sonsacar a Villarejo para que le contara cositas de los prostíbulos de Sabiniano para usarlos contra Pedro Sánchez en las primarias.

Anteproyecto de Ley de Administración Abierta se llama el invento y los rasgos que mejor lo definen son justamente los señalados ayer por este López en su intervención: transparencia, integridad, rendición de cuentas, participación ciudadana y apertura institucional. Pedro Sánchez reforzaba el discurso de Óscar López desde Vitoria: «El compromiso del Gobierno de España ha sido siempre el mismo: más transparencia, más rendición de cuentas, más apertura institucional».

Y eso, ¿en qué se traduce? Pues en el decreto que considera materia clasificada los vuelos de aquí su señora en el Falcon, a qué destinos y en qué compañías. Hemos llegado a conocer que lo usó para acudir a homenajes a Almodóvar y Serrat, pero no sabemos qué vuelos ha hecho a la República Dominicana, con qué fin, quienes la acompañaban ni cuántas veces, hija mía, cuántas veces.

Su marido, el yerno de Sabiniano, respondió en marzo del año pasado a Feijóo en el Congreso que: «El Gobierno de España está colaborando con la Justicia y rindiendo cuentas ante las Cortes». Seis meses más tarde recibió en La Moncloa al juez Peinado, tras un rifirrafe en el que intentó declarar por escrito, pero que el juez instructor no le admitió. ¿Y para qué querría declarar por escrito si se acogió a su derecho a no declarar? Nadie discutiría que el marido de Begoña tiene todo el derecho del mundo a no declarar, como hizo a su vez la excontable de los negocios de papá, pero su derecho no es un argumento que pregone su inocencia. Seguramente es triste, pero es así la vida, como le decía el difunto Pirri a Antonio Resines en La reina del mate.

Puede que en el futuro se acabe acuñando a modo de frase hecha -idiom, que dirían los británicos-la expresión «tener más recorrido que Begoña ante el juez», aunque no será un modelo de precisión. Seis veces, seis, ha sido convocada Begoña Gómez Fernández, la chica de Sabiniano y esposa del presidente del Gobierno, por el juez José Luis Peinado, aunque comparecer, lo que se dice comparecer, solo lo haya hecho en cuatro ocasiones y con actitudes diversas: las dos primeras veces se acogió a su muy legítimo derecho a no declarar, la tercera y la cuarta solo respondió a las preguntas que le hizo su defensa y a las dos últimas no compareció. Ya lo hemos dicho respecto a la misma actitud de su marido: la negativa a responder, legalmente irreprochable, no ayuda a que creamos en su inocencia. Y lo miremos como lo miremos, no es el comportamiento de la pareja un modelo de colaboración con la justicia.

Hay que recordar que el presidente del Gobierno hace novillos sistemáticamente los miércoles en que debería afrontar las sesiones de control al Ejecutivo. Lo del Senado es mucho más impresionante porque lleva 19 meses sin pisarlo, pese a la obligación legal de comparecer una vez al mes. Hace ocho días que el presidente se pasó por salva sea parte una obligación taxativa que le impone la Constitución en su artículo 134.3 de haber presentado en el Congreso los Presupuestos Generales del ejercicio próximo. Era su obligación hacerlo antes del pasado 1 de octubre y ya es el tercer año consecutivo en el que incurre.

Estableció ayer el Consejo de Ministros que «los cargos de confianza tendrán que publicar su currículo en el Portal de Transparencia», pero la tesis doctoral que a Pedro Sánchez le plagiaron en la Universidad Camilo José Cela era inaccesible para periodistas e investigadores, aunque estuviera en la aplicación de consulta TESEO, una base de datos con las tesis publicadas desde 1976. Y qué mosqueo se agarró cuando empezamos a saber lo de su plagio y amenazó con medidas legales en defensa de su honor. Ni una sola demanda, oigan.

Es todo al revés de cómo lo dice este tío, un fenómeno. Bueno, todo, todo, no. Hay un elemento de transparencia indudable en la ventanita de los sobres en los que se embutía la mordida de los Koldos y los Ábalos.

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