Lo que interesa a la gente
Jordi Bernal

Lo que interesa a la gente

Si en algo podemos darle la razón a los políticos que este domingo echaron a la calle a la gente (todavía no me ha quedado claro si mucha o poca) con la rojigualda es que Sánchez ha dado una vidilla a los independentistas de la que carecían en los últimos meses.

Yours Faithfull
Pau Luque

Yours Faithfull

Marianne Faithfull está en plena forma. Esto, que podría sonar como humor negro para cualquier que conozca las vicisitudes de su vida ­– y que precisamente por ser humor negro no molestaría a la dama en cuestión –, se convierte en una verdad tan firme como los puentes sobre el Támesis cuando uno escucha sus dos últimos discos de estudio, Negative Capability (2018) y Give My Love to London (2014).

Relatores
Jaime G. Mora

Relatores

Cuando Pedro Sánchez asumió la Presidencia del Gobierno, lo primero que hizo fue poner a un relator al frente de su gabinete. Eso era Iván Redondo: un vendedor de políticos, un experto en marketing, una especie de gurú de El Ala Oeste de la Casa Blanca, y no un experto fontanero para forjar esos acuerdos parlamentarios que necesitaría un Gobierno sostenido solo por 84 diputados.

Un relator para enfrentarlos a todos
Ricardo Dudda

Un relator para enfrentarlos a todos

El debate sobre el “relator” o mediador para una posible mesa de negociación de los partidos catalanes (que en realidad no incluye ni a PP ni a Ciudadanos, este último el partido que ganó las elecciones en Cataluña) ha provocado un terremoto político. Por una parte, la cesión del gobierno en este aspecto es sorprendente: durante años ha sostenido que no es necesaria una mediación en la negociación entre Cataluña y el Estado, que para eso está el parlamento.

Lo que Sánchez se llevó
Aurora Nacarino-Brabo

Lo que Sánchez se llevó

La quiebra del bipartidismo en diciembre de 2015 alteró el paisaje parlamentario e inauguró un tiempo nuevo en la formación de mayorías de gobierno. La estabilidad política habría de pasar, desde entonces, por el entendimiento de, al menos, dos grandes fuerzas políticas.

Cultura para rojos, cultura para fachas
Carlos Mayoral

Cultura para rojos, cultura para fachas

Semanas atrás, Moreno Bonilla, flamante presidente de la junta andaluza, citó sin demasiada gracia, como citan los que no han leído al citado, versos de Machado y de Lorca durante su investidura. Automáticamente, como quien aprieta el botón de un arma, saltó Teresa Rodríguez del asiento buscando foco para recordarle a Juanma Moreno que ahora los peperos pactan con el franquismo y que, por tanto, citar a Machado o a Lorca no es posible. O lo que traducido al román paladino viene a significar: Machado y Lorca son nuestros, no te acerques. Si el presidente de la Junta hubiera, como digo, leído a Machado, habría podido contestar con aquella frase de su Mairena: “Estamos abocados a que sólo queden en pie las virtudes cínicas, y los políticos tendrán que aferrarse a ellas, gobernar con ellas”.