
Begoña paloma blanca, paloma mía
«Ya se verá si puede probarse o no judicialmente su tráfico de influencias, pero con lo ya conocido su corrupción moral es ya irrefragable»

«Ya se verá si puede probarse o no judicialmente su tráfico de influencias, pero con lo ya conocido su corrupción moral es ya irrefragable»

“Cuando acabó la fiesta sabríamos que el presidente nos había conminado a pensar durante cinco días si no debían estar, él y su familia, por encima de la ley”

“He visto cómo otro presidente desaparecía –esta vez no en el maletero–, camino de otra gloria imaginaria conjurada por sus arúspices”

“A la vista de la maniobra en curso, solo cabe estar seguro de que su éxito servirá de base a ese caudillaje que Sánchez afirma día a día, consolidando una dictadura”

«Llega a un punto en su sensiblería, en su incomprensión ante la falta de veneración, en la que el narcisista se presenta como una víctima»

«Es un lenguaje cesarista, bonapartista. El líder es criticado y se defiende con la manipulación emocional, la apelación a las masas, el sentimentalismo tóxico»

“¿Acaso no os dais cuenta del colosal caudillismo que anida ahora detrás de este gesto de Pedro Sánchez? ¿Que se ponen aún más ladrillos en ese muro que nos divide?”

«Lo que quiere decir no es que no le merezca la pena ser presidente, sino que no tiene por qué soportar que la justicia investigue a su entorno siendo él presidente»

«Parecía que habíamos abandonado el problema de la unión de inflación y de estancamiento, pero vuelve a ser el elemento más peligroso en el horizonte»