Cadena perpetua para el exdictador de Chad por crímenes de guerra
Habré, que acudió al juicio vistiendo un turbante blanco y gafas de sol, rompió su silencio para lanzar gritos contra el neocolonialismo. Por su parte, desde Human Rights Wath aseguran que esta condena «representa una inmensa victoria para las víctimas chadianas”, según el abogado de la organización, Reed Brody, apodado ‘el cazador de dictadores’. «La época en la que los tiranos podían maltratar a su pueblo, saquear las riquezas de su país y luego huir al extranjero para beneficiarse de una vida de lujos ha llegado a su fin”, señala. Hissène Habré gobernó Chad entre 1982 y 1990. Durante este tiempo su régimen torturó a decenas de miles de personas y se calcula que unas 40.000 fueron asesinadas o murieron en los distintos centros de detención creados por su régimen. Se trataba tanto de militantes de la oposición como de miembros de las etnias Hadjarai y Zaghawa que fueron acusados de conspirar contra la seguridad del Estado, así como población civil del sur del país.
El exdictador chadiano Hissène Habré ha sido condenado a cadena perpetua tras ser declarado culpable de crímenes contra la humanidad por ordenar decenas de miles de asesinatos políticos y torturas durante su mandato –1982-1990–. El veredicto ha sido leído en Dakar por el juez especial de las Cámaras Africanas Extraordinarias, dando de esta forma por finalizado un proceso histórico en el que por primera vez un expresidente africano responde ante el tribunal de un país subsahariano.
Habré, que acudió al juicio vistiendo un turbante blanco y gafas de sol, rompió su silencio para lanzar gritos contra el neocolonialismo. Por su parte, desde Human Rights Wath aseguran que esta condena «representa una inmensa victoria para las víctimas chadianas”, según el abogado de la organización, Reed Brody, apodado ‘el cazador de dictadores’. «La época en la que los tiranos podían maltratar a su pueblo, saquear las riquezas de su país y luego huir al extranjero para beneficiarse de una vida de lujos ha llegado a su fin”, señala.
Hissène Habré gobernó Chad entre 1982 y 1990. Durante este tiempo su régimen torturó a decenas de miles de personas y se calcula que unas 40.000 fueron asesinadas o murieron en los distintos centros de detención creados por su régimen. Se trataba tanto de militantes de la oposición como de miembros de las etnias Hadjarai y Zaghawa que fueron acusados de conspirar contra la seguridad del Estado, así como población civil del sur del país.