El Gobierno de Maduro silencia los casos de bebés con microcefalia por el Zika
Médicos entrevistados por Reuters en varias ciudades del país dicen saber de 50 casos confirmados de recién nacidos con el síndrome probablemente asociado al Zika y medios locales contabilizan en lo que va de año unos 60 bebés con sospechas de microcefalia vinculada al virus. Venezuela sí ha informado a la Organización Mundial de la Salud (OMS), a la cual reportó 1.964 casos de Zika en su territorio desde el año pasado y otros 58.212 permanecen como sospechosos. Pero aún no reporta casos de síndrome congénito como la microcefalia, asociado con el virus de Zika, ni siquiera uno en el que exista esa sospecha. Estos casos se producen en plena crisis de desabastecimiento en supermercados y farmacias de todo el país. La escasez de anticonceptivos, que incrementan los embarazos no deseados, y la falta de repelente para disminuir las picaduras de los mosquitos transmisores del Zika hacen todavía más difícil atenuar la incidencia de nacidos con microcefalia. La microcefalia es una malformación que provoca que la cabeza y el cerebro del niño sean considerablemente más pequeños y puede causar afectaciones en el desarrollo de tipo psicológico, motor y de aprendizaje.
Reuters
El Gobierno socialista del presidente Nicolás Maduro no ha reconocido ningún caso de microcefalia en bebés a consecuencia del virus del Zika, pero el Instituto de Medicina Tropical, de la Universidad Central de Venezuela, estima que el número de bebés con este trastorno aumentaría a finales de año de 563 a 1.400 niños. Pese a la incendia del virus en todo el continente latinoamericano, el Gobierno ha suministrado pocos detalles del impacto del brote.
Médicos entrevistados por Reuters en varias ciudades del país dicen saber de 50 casos confirmados de recién nacidos con el síndrome probablemente asociado al Zika y medios locales contabilizan en lo que va de año unos 60 bebés con sospechas de microcefalia vinculada al virus. Venezuela sí ha informado a la Organización Mundial de la Salud (OMS), a la cual reportó 1.964 casos de Zika en su territorio desde el año pasado y otros 58.212 permanecen como sospechosos. Pero aún no reporta casos de síndrome congénito como la microcefalia, asociado con el virus de Zika, ni siquiera uno en el que exista esa sospecha. Estos casos se producen en plena crisis de desabastecimiento en supermercados y farmacias de todo el país. La escasez de anticonceptivos, que incrementan los embarazos no deseados, y la falta de repelente para disminuir las picaduras de los mosquitos transmisores del Zika hacen todavía más difícil atenuar la incidencia de nacidos con microcefalia. La microcefalia es una malformación que provoca que la cabeza y el cerebro del niño sean considerablemente más pequeños y puede causar afectaciones en el desarrollo de tipo psicológico, motor y de aprendizaje.
