Primera dimisión en el Gobierno rumano tras las protestas contra la corrupción
Florin Jianu, ministro del Gobierno rumano, ha dimitido en medio de las protestas multitudinarias de los ciudadanos contra un decreto que amnistía a docenas de altos cargos acusados de corrupción. El titular de Negocios, Comercio y Emprendimiento ha anunciado en Facebook su decisión de renunciar al cargo porque «es lo más ético», «no por defender mi honestidad profesional, porque tengo la conciencia tranquila, sino por mis hijos».
Florin Jianu, ministro del Gobierno rumano, ha dimitido en medio de las protestas multitudinarias de los ciudadanos contra un decreto que amnistía a docenas de altos cargos acusados de corrupción. El titular de Negocios, Comercio y Emprendimiento ha anunciado en Facebook su decisión de renunciar al cargo porque «es lo más ético», «no por defender mi honestidad profesional, porque tengo la conciencia tranquila, sino por mis hijos».
Más de 250.000 ciudadanos salieron a la calle en la noche del miércoles, en la manifestación más numerosa contra la corrupción desde la caída del comunismo en Rumanía en 1989. Los ciudadanos se mostraron indignados por un decreto que despenaliza los delitos de corrupción, aprobado por el ejecutivo en la noche del martes, apenas un mes después de la llegada al poder del Gobierno socialdemócrata del primer ministro Sorin Grindeanu. El texto entrará en vigor en 10 días a menos que sea bloqueado por una orden judicial.
El ministro dimisionario, en su declaración, se preguntaba: «¿Cómo voy a mirar a mis hijos a los ojos y qué les voy a decir con el paso del tiempo?». «¿Voy a contarles que su padre fue un cobarde que apoyaba decisiones en las que no creía, o que decidió salirse de una historia que no compartía?».
El Gobierno no parece dispuesto a rectificar, ya que asegura que el decreto está pensado para aliviar las cárceles donde los presos viven hacinados, además de adaptar el código penal a las nuevas normas constitucionales. Desde la Unión Europea, Jean-Claude Juncker expresó la preocupación del bloque por estas medidas, advirtiendo al Gobierno de Rumanía que la lucha contra la corrupción «necesita avances, no pasos atrás».