La policía federal intenta entrar por la fuerza en el Congreso brasileño
La policía que se encontraba dentro del recinto del Congreso encargada de proteger a los diputados tuvo combatir a cientos de policías federales que trataban de invadir el congreso brasileño. La unión de policías se encontraba manifestándose en contra de la propuesta de ley que reduciría los beneficios de las pensiones estatales.
La policía encargada de proteger a los diputados dentro del recinto del Congreso tuvo combatir a cientos de policías federales que trataban de invadir la Cámara brasileña. La unión de policías se encontraba manifestándose en contra de la propuesta de ley que reduciría los beneficios de las pensiones estatales.
La policía del Congreso, vestida con el equipamiento antidisturbios y lanzando gas lacrimógeno, tuvo que hacer frente a los manifestantes que comenzaron a romper los cristales de la institución en un estallido de violencia que deja constancia de la impopularidad de la que disfruta la reforma de las pensiones del Presidente Michel Temer. La propuesta está destinada a equilibrar las cuentas públicas de Brasil, que se encuentran en números rojos.
La Cámara Baja de los Diputados, en donde se celebrará el debate sobre la propuesta de ley, declaró en un comunicado que los 500 manifestantes, en su mayoría policías fuera de servicio, que intentaron invadir el edificio no lo consiguieron.
La reforma incrementa la edad de jubilación hasta los 65 años en un estado en el que el sector público se retira a los 54 para disfrutar de una generosa seguridad social, que es realmente la causa de los problemas de déficit por los que pasa Brasil.
La policía siguió con las protestas a pesar de que el gobierno anunció concesiones como la disminución de la edad de jubilación de mujeres, profesores y policías, que diluirían el ahorro fiscal en una quinta parte. Los cambios proponen una reducción de la edad de jubilación de 65 a 60.
Al fracaso derivado de esta propuesta de ley hay que añadirle el rechazo de la Cámara Baja al esfuerzo de Tremer para modernizar la ley laboral que harían los contratos de trabajo más flexibles para mejorar el entorno empresarial de Brasil. Sin embargo, un portavoz de la Cámara, Rodrigo Maia aseguró que el revés sufrido fue resultado de un error parlamentario, lo que deja en el aire la posibilidad de celebrar una nueva votación.