Los estados que han legalizado la marihuana medicinal prescriben menos medicamentos
Según un estudio publicado en la revista Health Affairs, la reducción se produce sobre todo en los medicamentos que tienen que ver con cinco dolencias que pueden ser tratadas con la marihuana medicinal. Dichas dolencias son la depresión, las náuseas, el dolor, la psicosis y las convulsiones. Esta reducción conlleva un ahorro que se refleja en el programa de seguros Medicaid, y que está asociado a las leyes aprobadas en distintos estados de Estados Unidos para regular la marihuana medicinal. Según los datos, este ahorro «pasó de 260,8 millones de dólares en 2007 a 475,8 millones en 2014».
Según un estudio publicado en la revista Health Affairs, la reducción en la prescripción de fármacos se produce sobre todo en los medicamentos que tienen que ver con cinco dolencias que pueden ser tratadas con la marihuana medicinal. Dichas dolencias son la depresión, las náuseas, el dolor, la psicosis y las convulsiones. Esta reducción conlleva un ahorro que se refleja en el programa de seguros Medicaid, y que está asociado a las leyes aprobadas en distintos estados de Estados Unidos para regular la marihuana medicinal. Según los datos, este ahorro «pasó de 260,8 millones de dólares en 2007 a 475,8 millones en 2014».
«Tenemos pruebas de que las leyes de aprobación de la marihuana reducen el número de medicamentos recetados en programas de Medicaid», explica en el periódico eldiario.es el autor principal del estudio, el investigador de la Universidad de Georgia, David Bradford. «Nuestros hallazgos sugieren que los pacientes y los médicos están reaccionando a la disponibilidad de marihuana medicinal como si fuera un medicamento más».
En Estados Unidos, 28 de los 50 estados han legalizado de alguna manera el consumo de cannabis. Según los propios autores del estudio, si en 2014, en todo el país norteamericano hubiera estado legalizado el uso de esta sustancia, el ahorro total en el programa de seguros Medicaid habría sido superior a los mil millones de dólares.
Pero el estudio que encabeza el investigador David Bradford también ofrece información sobre la posibilidad de utilizar el cannabis para atajar, o al menos frenar, el problema de adicción a los opiáceos que sufre Estados Unidos y que en 2014 provocó la muerte de más de 28.000 personas, de acuerdo con las cifras que recoge la agencia EFE procedentes de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) del país norteamericano.