Iglesias pierde la moción de censura, acusado de falta de ideas por la mayoría

Como estaba previsto, la moción de censura presentada por el candidato a la Presidencia del Gobierno de Unidos Podemos, Pablo Iglesias, contra el Gobierno de Mariano Rajoy, no ha prosperado al ser rechazada por la mayoría de la Cámara baja. En los dos días de debate, Iglesias ha escuchado cómo gran parte de los grupos coincidía en reprocharle haber acudido al Congreso sin ideas y sin un programa de gobierno alternativo como establece la Constitución.

La moción ha contado con 82 votos a favor – de Unidos Podemos y sus confluencias, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), EH Bildu y Compromís; 170 votos en contra, del PP, Ciudadanos, Coalición Canaria, y 97 abstención con PSOE, PNV y Nueva Canarias. 

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha comentado al término del Pleno sentirse «contento y satisfecho» porque «vamos a poder seguir trabajando», mientras que para Pablo Iglesias, la derrota no es más que el inicio de un nuevo camino hacia la consecución de sus objetivos. «Hoy estamos mucho más cerca de sacar al PP de las instituciones y vamos a seguir trabajando para sacarlo del Gobierno». «Estamos en la buena dirección de construir una nueva mayoría y espero que antes de Navidades podamos sacar al PP del gobierno», ha añadido, subrayando que los populares sólo han conseguido 140 votos.

Si en el primer día de debate, el protagonismo recayó en el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que intervino para contestar a las acusaciones de corrupción realizadas durante las largas intervenciones de la portavoz de Unidos Podemos, Irene Montero, y del candidato Pablo Iglesias, en el segundo y último día, ha sido el portavoz socialista, José Luis Ábalos, el que ha rechazado sumarse a una iniciativa que ha descalificado pese a la mano tendida ofrecida por el líder de izquierdas en sus intervenciones durante el debate.

A ambos partidos sólo les une su rechazo al PP, como ha dejado claro Ábalos. «Este gobierno merece una censura» por sus casos de corrupción, por su política económica, por su «brutal política de austeridad» pero, para ello, es necesario presentar un programa de gobierno alternativo. «Alguna duda tenemos sobre las razones verdaderas de esta moción», ha precisado el dirigente socialista haciéndose eco de un documento interno de Podemos en el que se indica que su objetivo no es tanto llegar a La Moncloa como mantenerse en el centro del interés mediático, aparte de criticar al PSOE.

«Creo que esta moción de censura no es buena, porque no esta bien planteada», ha dicho Ábalos acusando a Iglesias de no haber contactado con el PSOE antes de presentarla, algo que también criticó el miércoles EH Bildu, que pese a todo, sí ha dado su apoyo a Iglesias.  «Han ignorado a la segunda fuerza política de esta cámara y principal partido de la oposición», así que «no nos hagan responsables de una moción que ni con nuestro apoyo saldría adelante», ha indicado el diputado socialista, recordando a Iglesias que en marzo del año pasado «hubo una gran oportunidad para echar al señor Rajoy» cuando el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, se presentó a la investidura «pero Podemos decidió sumar sus votos a los del PP».

Iglesias, por su parte, ha asegurado que su partido es «generoso» y «si ustedes presentan una moción de censura la apoyaremos». El líder de Podemos ha instado al PSOE a «ponernos a trabajar para echar al PP del Gobierno».

El segundo día del debate fue reanudado a las 09:00 horas por el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, quien mantuvo un tenso intercambio de acusaciones y reproches con Iglesias. Ambos se acusaron mutuamente de haber permitido que Rajoy fuera reelegido presidente del Gobierno, demostrando su antagonismo en cuanto a las políticas de Estado que necesita España.

La intervención del portavoz del Grupo Popular, Rafael Hernando, ha elevado el tono hasta entonces moderado de la jornada, jaleado por la bancada de la derecha con constantes aplausos, cuando ha acusado a los miembros de Podemos de ser «mercenarios del chavismo», de «populismo» y de haberse dejado «comprar» por el Gobierno de Irán. Hernando ha acusado también a Iglesias de presentar una moción de censura perdida de antemano que sólo cuenta con «malas compañías» como EH Bildu y Esquerra Republicana de Catalunya, además de Compromís «que le apoya obligado porque ya le pidió que retirara la moción».

Hernando ha admitido que la crisis provocó mucha frustración al dispararse el paro, y también ha admitido errores en el PP por los casos de corrupción, pero ha subrayado que gracias al gobierno «la situación económica de España ha mejorado» y «en cuanto a la corrupción, en el PP tenemos claro que quien la hace la paga».  «Usted nunca será presidente del gobierno de España, señor Iglesias; acepte su fracaso y retire la moción de censura o retírese», ha concluido.

«Me gustaría decirle, señor Hernando, que usted nunca irá a la cárcel pero en vista de los antecedentes de los miembros de su partido, no sé si será así», ha comenzado diciendo el candidato en su turno de réplica, que ha pedido «un poco de dignidad democrática» al PP. Al igual que el día anterior, la principal conclusión de Iglesias en su última intervención ha sido afirmar que «Mariano Rajoy va a pasar a la historia como el presidente de la corrupción«. El debate ha concluido con un duro cruce de acusaciones entre ambos que ha provocado las quejas de la bancada de Podemos cuando Hernando ha mencionado la relación sentimental de Iglesias y la portavoz Montero.