Una concentración histórica en Estambul protesta contra la deriva totalitaria de Erdogan
Un gigantesco mitin opositor para protestar contra la encarcelación de un diputado ha congregado este domingo en Estambul a cientos de miles de personas, más de dos millones según el Partido Republicano del Pueblo (CHP).
Un gigantesco mitin opositor para protestar contra la encarcelación de un diputado ha congregado este domingo en Estambul a cientos de miles de personas, más de dos millones según el Partido Republicano del Pueblo (CHP).
El mitin ha sido la parte final de la Marcha por la justicia, que el líder opositor Kemal Kiliçdaroglu inició el 15 de junio en Ankara, a 450 kilómetros de Estambul. El acto ha sido, de lejos, el mayor de la oposición en Estambul desde las manifestaciones masivas de mayo y junio de 2013 contra el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
«Que nadie piense que esta marcha es la última», ha manifestado a la multitud Kiliçdaroglu, líder del CHP, socialdemócrata, al término de 25 días de marcha. «El 9 de julio será una nueva etapa, un renacer».
A sus 68 años, Kiliçdaroglu ha recorrido 450 km desde la capital turca hasta Estambul para denunciar la condena a 25 años de cárcel al diputado del CHP Enis Berberoglu por proporcionar información confidencial al diario opositor Cumhuriyet.
Avanzando sin insignias partidistas y con Justicia como único eslogan, Kiliçdaroglu ha logrado reunir a una multitud que no ha cesado de crecer, atrayendo a miles de opositores al presidente Erdogan.
«Hemos marchado por la justicia, hemos marchado por el derecho de los oprimidos, hemos marchado por los diputados recluidos, hemos marchado por los periodistas encarcelados, hemos marchado por los profesores universitarios despedidos», ha defendido ante la multitud congregada en una inmensa explanada junto al mar cerca de la prisión de Maltepe, donde está encerrado Berberoglu desde el 14 de junio.
Habitualmente, sólo Erdogan logra reunir multitudes de estas dimensiones en ocasión de sus mítines.
El gobierno ha calificado la marcha de estratagema, en tanto que Erdogan ha acusado a Kiliçdaroglu de apoyar a los «terroristas» y a los conspiradores del fallido golpe de Estado del 15 de julio de 2016.
La oposición en Turquía denuncia una deriva autoritaria del presidente Erdogan, en particular desde que reforzó considerablemente sus poderes tras un referéndum en abril. También debido a las purgas realizadas desde el intento de golpe de Estado: unas 50.000 personas fueron detenidas y más de 100.000, despedidas o suspendidas de sus funciones.
«Hemos marchado porque nos oponemos al régimen de un solo hombre», ha afirmado Kiliçdaroglu. «Hemos marchado porque el poder judicial está bajo el monopolio del ejecutivo«.
Kiliçdaroglu ha condenado firmemente el intento de golpe -del que se acusa al predicador Fetullah Gulen, quien vive en Estados Unidos y rechaza su implicación-, pero ha sido muy crítico con el alcance del estado de emergencia.