La oposición lanza su mayor desafío a Maduro con una consulta al margen del Gobierno
La oposición venezolana lanza este domingo su mayor desafío al Gobierno de Nicolás Maduro con la convocatoria de una consulta calificada de ilegal desde el oficialismo en la que espera que el pueblo se pronuncie masivamente contra el proceso constituyente impulsado por el chavismo. Convocada por la oposición con el aval del Parlamento, que ha invocado el derecho constitucional a la desobediencia cuando el Gobierno atropella la democracia, el plebiscito tiene el respaldo de importantes actores del tejido económico, cultural y civil del país.
La oposición venezolana lanza este domingo su mayor desafío al Gobierno de Nicolás Maduro con la convocatoria de una consulta calificada de ilegal desde el oficialismo en la que espera que el pueblo se pronuncie masivamente contra el proceso constituyente impulsado por el chavismo. Convocada por la oposición con el aval del Parlamento, que ha invocado el derecho constitucional a la desobediencia cuando el Gobierno atropella la democracia, el plebiscito tiene el respaldo de importantes actores del tejido económico, cultural y civil del país.
Las reacciones que ha suscitado muestran con claridad la ruptura completa entre los poderes públicos, y de algunos de estos con buena parte de la sociedad en Venezuela. El referendo -que pregunta también a los venezolanos si quieren la convocatoria de elecciones y pide a los militares que defiendan la Constitución vigente– ha sido denunciado ante el Tribunal Supremo por el diputado oficialista Pedro Carreño, que pide que sea declarado nulo y lo tacha de «plan golpista».
Pero poco importa a quienes apoyan la consulta lo que diga el Supremo, un tribunal acusado de servir al Gobierno de Maduro cuya legitimidad no reconocen ni el Parlamento ni la fiscal general, Luisa Ortega, que también se ha rebelado contra un Gobierno al que recrimina convertir al país en un «estado policial» y practicar «terrorismo de Estado».
A pesar de que la jornada transcurra con relativa normalidad -especialmente teniendo en cuenta la tensa situación del país-, según acaba de informar el jefe de campaña, Carlos Ocariz, un tiroteo provocado por un grupo paramilitar ha terminado con una persona muertas y cuatro heridos graves en un centro de votación en Catia, un barrio popular al oeste Caracas.
En Catia paramilitares chavistas dispararon. Se reportan 2 muertos y varios heridos en punto de #ConsultaSoberana pic.twitter.com/1OSx4Bxe3F
— Anonymous Venezuela (@VenezuelaAnons) 16 de julio de 2017
En el centro de votación, la Iglesia del Carmen de Catia, se encuentran retenidos los votantes ante la presencia de paramilitares armados. Según informan algunos medios locales, el periodista Luis Olavarrieta habría sido secuestrado por estos colectivos violentos.
Según el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa de Venezuela, el periodista ha sido encontrado poco después golpeado, y sin su teléfono móvil.
ÚLTIMA MINUTO Apareció @LuisOlavarrieta golpeado. Va camino a una clínica. Civiles armados (Colectivos) le robaron su teléfono #16Jul
— SNTP (@sntpvenezuela) 16 de julio de 2017
Por ahora, la consulta parece tener un éxito notable, a veces incluso sobresaliente. El primer vicepresidente de la Asamblea Nacional, Freddy Guevara, ha asegurado que por el momento las expectativas de participación en el plebiscito convocado por la oposición en contra de la Constituyente de Nicolás Maduro están siendo superadas. De hecho, según informan medios locales, el material electoral de la consulta comienza a agotarse en varios centros.
Por su parte, el presidente de la Asamblea Nacional, Julio Borges, ha hecho un llamamiento a la ciudadanía de no obstaculizar las calles para permitir que la jornada se cumpla con normalidad.
A pesar de anunciar que no podría votar por el arresto domiciliario bajo el que se encuentra, Leopoldo López ha anunciado a través de sus redes sociales que finalmente vota «‘sí tres veces».
Vamos Venezuela, Vamos! Con mucha Fuerza y con mucha Fe, acabo de decir Si tres veces por una Mejor Venezuela pic.twitter.com/Ntabq1PmoZ
— Leopoldo López (@leopoldolopez) 16 de julio de 2017
Papeletas quemadas
Sin embargo, y para tranquilizar a quienes temen posibles castigos -a través del sistema de distribución estatal de alimentos o a los empleados en empresas públicas-, los impulsores del plebiscito se han comprometido a quemar las papeletas y las listas de participación para que no lleguen a manos del Gobierno.
En estas circunstancias, la mayor inquietud apuntada por opositores y críticos de Maduro viene de los llamados «colectivos», grupos civiles de chavistas armados que algunos consideran «paramilitares» del Gobierno y han asaltado el Parlamento e intimidado a manifestantes antichavistas en los últimos meses.
Su posible presencia en las calles preocupa sobre todo en las zonas tradicionalmente chavistas, en las que el oficialismo niega el menor malestar con el Gobierno y donde la oposición tiene su principal reto cerca de dos años después de la mayoría absoluta las legislativas de diciembre de 2015, las últimas celebradas en la nación caribeña.
Problemas para votar en Barcelona
La crisis que vive el país latinoamericano ha provocado una gran ola de emigración de ciudadanos venezolanos que desde el extranjero han querido votar en la consulta de la oposición.
En España, destaca la polémica vivida en Barcelona, donde el Ayuntamiento de Ada Colau ha impedido colocar en un centro cívico las urnas, según argumenta el consistorio por no haber tramitado los permisos. Por ello, la votación se ha trasladado a la calle, que ha sido cortada al tráfico por la Policía Urbana.
#16J Regidor Ayuntamiento #Bcn deniega permiso uso local a #MovimientoLibertador #BoicotALaDemocracia pic.twitter.com/0HyVT7tOcn
— Francesca Benito (@FrancescaBcn1) 16 de julio de 2017
Hasta ahora, y en todo el territorio español, más de 10.000 personas han depositado ya su voto. En Madrid también se han instalado urnas para el plebiscito en la Puerta del Sol y en Colón. Hasta las 20:00 horas los mayores de edad podrán acudir a votar.
Buenos dias @xavier_torrens IMAGENES DE MADRID 16J 9:00hr. Por Venezuela SI SI SI pic.twitter.com/5bsHr0vYmm
— Causa:Venezuela (@lacausaVzla) 16 de julio de 2017
Importantes apoyos en la sociedad venezolana
Al llamamiento opositor a acudir a las urnas y votar ‘sí’ a las tres preguntas se han sumado importantes sectores de la sociedad civil como la influyente Federación de Cámaras de Comercio (Fedecámaras), sindicatos no oficialistas, organizaciones estudiantiles y algunas de las universidades más prestigiosas del país.
Uno de los más sólidos apoyos viene de la Iglesia venezolana, que ha cedido sus instalaciones para la votación y ha reconocido la legitimidad de este referendo contra una Constituyente cuya apuesta por el «Estado comunal» es vista por los obispos como una vía a la «constitucionalización de una dictadura comunista» en Venezuela.
La consulta cuenta con el dinamismo que le dan los miles de ciudadanos volcados en las labores organización como voluntarios, quienes han puesto a disposición del referendo mesas, sillas, comercios y automóviles para desplazar votantes. Sin embargo, debido al corto tiempo en que se convocó, y al no estar auspiciada por el Poder Electoral, carece de algunos mecanismos de control y no puede asegurar que los ciudadanos no voten más de una vez por persona en todos los centros del país o del extranjero, donde tienen permitido expresarse sin importar dónde están inscritos como votantes.
Los líderes de la coalición opositora han apelado a la conciencia de los venezolanos que vayan a pronunciarse para que no depositen más de una papeleta.
Para contrarrestar estas informalidades propias de la naturaleza misma de una consulta organizada contra el Poder Electoral y el Gobierno, los convocantes han encargado a cinco rectores universitarios del país que actúen como garantes, y miles de voluntarios harán de interventores siguiendo el proceso en las mesas. A este mayor rigor pretende contribuir también la presencia como observadores, a invitación cursada por el Parlamento, de diputados y expresidentes de otros países, como el mexicano Vicente Fox y el colombiano Andrés Pastrana.
Consiga la oposición o no movilizar a una parte importante de los venezolanos contra la consulta, la mayor cuestión vendrá el lunes: cómo hacer valer unos votos que no están reconocidos por los poderes llamados a hacerlos efectivos.