Arabia Saudí reabre su frontera a los peregrinos cataríes en medio de la crisis
Arabia Saudí ha reabierto la frontera para permitir que los fieles cataríes realicen la peregrinación a La Meca, un primer signo de distensión tras la peor crisis diplomática que ha sufrido la región en años. El espacio aéreo también ha sido abierto. El príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salman, «ha permitido a todos los ciudadanos cataríes la entrada a Arabia Saudí para realizar el «hach» (peregrinación)», gracias a la mediación de un miembro de la familia real catarí, Abdalá bin Jasim al Thani, ha anunciado la agencia oficial de noticias saudí, SPA.
Arabia Saudí ha reabierto la frontera para permitir que los fieles cataríes realicen la peregrinación a La Meca, un primer signo de distensión tras la peor crisis diplomática que ha sufrido la región en años. El espacio aéreo también ha sido abierto. El príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salman, «ha permitido a todos los ciudadanos cataríes la entrada a Arabia Saudí para realizar el ‘hach’ (peregrinación)», gracias a la mediación de un miembro de la familia real catarí, Abdalá bin Jasim al Thani, ha anunciado la agencia oficial de noticias saudí, SPA.
Al Thani «ha ofrecido su mediación para abrir la frontera para la entrada de los peregrinos cataríes al territorio saudí», ha asegurado la agencia. «Las relaciones entre el reino y el estado de Qatar están firmemente arraigadas en las raíces de la historia«.
Por su parte, el nuevo príncipe heredero, que ha recibido a Al Thani en el palacio real en Yeda, ha destacado las relaciones «históricas» tanto del pueblo saudí con su «hermano» Qatar como entre ambas monarquías. Además, ha ordenado el envío de aviones privados, pertenecientes a la aerolínea oficial del reino Saudi Airlines, hacia al aeropuerto de Doha para los peregrinos cataríes, que se dirigirían después hacia el territorio saudí.
Arabia Saudí junto a Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Bahréin, cortó las relaciones con Qatar el pasado 5 de junio e impuso un bloqueo terrestre, naval y aéreo sobre el pequeño país del golfo Pérsico, al que acusa de financiar el terrorismo. Los cuatro países árabes acusaron el pasado 30 de julio a Doha de poner «obstáculos» a los habitantes del emirato para que viajen a La Meca para realizar la peregrinación, que este año tendrá lugar a finales de agosto.
La peregrinación o ‘hach‘ que todo musulmán debe hacer de forma obligatoria por lo menos una vez en la vida, siempre y cuando se disponga de la salud y los medios económicos suficientes para costear el viaje, se debe realizar durante el duodécimo mes del calendario islámico.
Las autoridades saudíes son las encargadas de organizar y supervisar la peregrinación a La Meca, uno de los cinco pilares del islam, que cada año realizan millones de creyentes, los cuales llegan de todo el mundo a Arabia Saudí.