ACNUR pide a Australia que evite una crisis humanitaria en el campo de refugiados de Manus
La ONU ha pedido este jueves al gobierno australiano que evite una situación de «emergencia humanitaria» en el campo de refugiados que tiene instalado en Papúa Nueva Guinea, concretamente en la isla de Manus.
La ONU ha pedido este jueves al gobierno australiano que evite una situación de «emergencia humanitaria» en el campo de refugiados que tiene instalado en Papúa Nueva Guinea, concretamente en la isla de Manus. El lugar, utilizado por las autoridades australianas como centro de detención hasta que se deciden las solicitudes de asilo, fue cerrado el martes después de que la Corte Suprema de Papúa Nueva Guinea lo declarara inconstitucional.
Sin embargo, 600 personas se atrincheraron en el recinto a pesar de que los responsables del mismo cortaron los suministros de agua y electricidad, y ya empiezan a escasear los alimentos. A los inmigrantes se les ha invitado a que acudan a otros centros llamados de «transición», pero se han negado asegurando que temen por su vida.
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), ha hecho una llamamiento para que el gobierno australiano actúe y evite una crisis humanitaria en la isla de Manus, en Papúa Nueva Guinea, ha informado en una comunicado.
La situación «es cada vez más tensa e inestable«, ha denunciado ACNUR, explicando que alguno de los centros alternativos no estaba preparado y que el resto no contaban con capacidad suficiente para albergar a todos los inmigrantes.
We urge Australia to take responsibility and provide protection and safety to these vulnerable human beings https://t.co/F2U2CN6zMW
— UN Refugee Agency (@Refugees) 2 de noviembre de 2017
«Los días pasan sin agua ni electricidad y creo que la tensión va a agravarse«, dijo a Lam Nai Jit, representante del ACNUR, en declaraciones a la agencia AFP. «La población local no ha sido preparada» para esta situación» y eso «crea un entorno de alto riesgo para las dos partes».
Los refugiados temen ser desalojados por la fuerza del campo controlado desde el miércoles por la Marina de Papúa Nueva Guinea, algo que fue negado por el comandante de la base naval Begsy Karaki al diario Post-Courier.
El ministro australiano de Inmigración, Peter Dutton, mantiene que los nuevos centros son «una alternativa mucho mejor» y que habría que «cerrar Manus lo antes posible«.
Australia propone varias alternativas a los refugiados, como ser transferidos hacia un centro de detención en el microestado insular de Nauru, ser trasladados a otro país como Camboya, o volver a su país. En los últimos días ha resurgido la posibilidad de que los refugiados sean acogidos por Nueva Zelanda, una opción que ya se había planteado en 2013.