La ambiciosa reforma fiscal de Trump sale adelante en el Senado de EEUU
Si al final se aprueba, será la primera gran reforma del mandato de Donal Trump, que hasta ahora se ha encontrado con importantes escollos para cumplir algunas de sus promesas electorales; entre ellas, su intención de derogar el sistema de salud de su antecesor, el ‘Obamacare’, ante el rechazo de los demócratas y una gran parte de los republicanos.
El Senado de Estados Unidos, de mayoría republicana, ha adoptado en la madrugada del sábado un ambicioso proyecto de reforma fiscal y de reducción de impuestos, lo que supone una importante victoria legislativa para el presidente Donald Trump. El proyecto se centra en una fuerte reducción del impuesto a las empresas, que pasaría del actual 35% al 20%.
El texto, adoptado por 51 votos contra 49, debe ser ahora armonizado con la versión adoptada por la Cámara de Representantes el pasado 16 de noviembre.
Si al final se aprueba, será la primera gran reforma del mandato de Donal Trump, que hasta ahora se ha encontrado con importantes escollos para cumplir algunas de sus promesas electorales; entre ellas, su intención de derogar el sistema de salud de su antecesor, el ‘Obamacare‘, ante el rechazo de los demócratas y una gran parte de los republicanos.
El vicepresidente Mike Pence fue el encargado de anunciar pasadas las 02.00 de la madrugada el resultado de la votación, que fue recibido con aplausos y felicitaciones entre la mayoría.
«Por primera vez desde 1986, Senado y Congreso han adoptado una gran reforma fiscal», se congratuló el presidente republicano de la Cámara baja, Paul Ryan. «Una oportunidad como ésta solo se presenta una vez por generación, debemos aprovecharla».
Por su parte, el presidente Donald Trump, reivindicó la victoria en un tuit en el que indicó que «estamos un paso más cerca de dar recortes tributarios ENORMES a las familias trabajadoras en todo Estados Unidos», añadiendo que su gobierno espera que la firma de la nueva ley se lleve a cabo antes de Navidades.
We are one step closer to delivering MASSIVE tax cuts for working families across America. Special thanks to @SenateMajLdr Mitch McConnell and Chairman @SenOrrinHatch for shepherding our bill through the Senate. Look forward to signing a final bill before Christmas! pic.twitter.com/gmWTny3SfS
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 2 de diciembre de 2017
Caballo de batalla de Trump
La reforma fiscal promovida por Trump cuenta con numerosos detractores, no sólo entre los políticos, principalmente demócratas, sino también entre una gran parte de los ciudadanos, que se han manifestado en contra de la misma.
En ella se incluye un importante recorte de los impuestos para las empresas, y una reducción pero temporal para las contribuyentes. Desde la oposición pero también dentro del propio Partido Republicano, se acusa a Trump de beneficiar a los ricos en detrimento de los ciudadanos con menos ingresos.
El multimillonario hizo de la reducción de impuestos el caballo de batalla de su política económica, con el objetivo, según su programa, de dar más poder adquisitivo a la clase media y estimular el crecimiento de la economía y el empleo.
Con esta reforma, el impuesto de las empresas, que es actualmente del 35%, pasará al 20%. Todas las categorías de contribuyentes deberían beneficiarse de la rebaja de los impuestos, según la Administración Trump. Solo el senador republicano de Tennessee, Bob Corker, votó en contra de la reforma porque, según él, esta ley aumentará el déficit público.
Para los demócratas el texto «tima» a la clase media porque beneficia más a las empresas y a los contribuyentes con mayores ingresos. «¡Esta noche el Tesoro federal ha sido saqueado!», declaró el senador Bernie Sanders.
«En plena noche, los senadores republicanos han traicionado a la clase media estadounidense», denunció, por su parte, Nancy Pelosi, la líder demócrata en la Cámara de representantes.