Trump deja a un lado su "Estados Unidos, primero" y pone la mirada en China y Rusia
«China y Rusia quieren crear un mundo que sea la antítesis de los valores y los intereses de Estados Unidos», ha subrayado el texto, con un lenguaje particularmente incisivo.
Donald Trump ha dejado a un lado su famoso eslogan «Estados Unidos, primero» a la luz de las amenazas a las que se enfrenta el país en materia de seguridad nacional, con una virulenta denuncia del papel de China y Rusia en la escena internacional.
El presidente estadounidense, quien en temas que van desde el clima hasta el libre comercio ha marcado una clara ruptura con su predecesor Barack Obama y ha contribuido a aislar a Estados Unidos, ha presentado este lunes su «Estrategia de seguridad nacional», informa AFP.
«China y Rusia desafían el poder, la influencia y los intereses de Estados Unidos y están tratando de socavar la seguridad y la prosperidad de Estados Unidos«, ha aseverado el documento, difundido antes del discurso presidencial.
«China y Rusia quieren crear un mundo que sea la antítesis de los valores y los intereses de Estados Unidos», ha subrayado el texto, con un lenguaje particularmente incisivo.
En su discurso, Trump afirmará que la competitividad económica es un «tema de seguridad nacional», ha un funcionario estadounidense, que recalcó la determinación del gobierno de luchar por intercambios equilibrados, en particular con China, definido como un país «competidor».
«La mejor arma que tenemos es la fuerza de nuestro PIB», ha añadido este funcionario, citando una frase del secretario estadounidense de Defensa, Jim Mattis.
Antes del discurso de Trump, Pekín dijo esperar que «contribuya a mejorar la confianza mutua entre China y Estados Unidos». Muchos elementos prueban que las relaciones económicas entre ambos países son «mutuamente beneficiosas», subrayó Hua Chunying, portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores.
Más allá del acento en el combate económico, la visión de Trump se desmarca de la de sus predecesores, tanto demócratas como republicanos, en la cuestión de la seguridad interior y del control de las fronteras.
El documento redactado por la administración Trump identifica cuatro prioridades: proteger el territorio estadounidense, promover la prosperidad, preservar la paz gracias a la fuerza y hacer avanzar la influencia de Estados Unidos.