Sajid Javid, nuevo ministro británico del Interior
Reino Unido ya tiene nuevo ministro de Interior tras la dimisión el pasado domingo de Amber Rudd. Se trata del exministro británico de Comunidades, Sajid Javid, de 48 años, hijo de pakistaníes que emigraron en la década de los sesenta a Reino Unido.
Reino Unido ya tiene nuevo ministro del Interior tras la dimisión este domingo de Amber Rudd. Se trata del exministro británico de Comunidades, Sajid Javid, de 48 años, hijo de paquistaníes que emigraron en la década de los sesenta a Reino Unido.
Este nombramiento llega sólo 12 horas después de que Rudd, de 54 años, telefoneara a la primera ministra Theresa May para informale sobre su decisión de renunciar al cargo tras las críticas y peticiones de dimisión de la oposición, después de que se revelara la existencia de cuotas anuales para deportar a inmigrantes ilegales.
Sajid Javid MP @SajidJavid becomes Secretary of State for the @UKHomeOffice
— UK Prime Minister (@10DowningStreet) 30 de abril de 2018
Ministra del Interior desde 2016, también se había visto envuelta en un escándalo relacionado con el trato reservado a la llamada generación ‘Windrush’, inmigrantes de origen caribeño que llegaron a Reino Unido tras la Segunda Guerra Mundial.
En el Twitter del nuevo ministro de Interior se puede leer un comentario en el que se mostraba «triste» por la decisión de Amber de dejar el Gobierno. «Un gran talento que sin duda regresará al gabinete pronto, lo que ayudará a fortalecer nuestra gran nación», escribía.
Very sad that Amber is leaving Government. A huge talent that will no doubt be back in Cabinet soon, helping to strengthen our great nation
— Sajid Javid (@sajidjavid) 29 de abril de 2018
Sin embargo, Javid reconocía, según recogen varios medios británicos, que el escándalo podría causar preocupación entre los votantes de minorías étnicas. Y en Sunday Telegraph, expresaba su amargura afirmando que su propia familia podría haberse visto amenazada de expulsión.
El Ministerio del Interior es uno de los departamentos clave del gobierno británico, y ahora, además de lidiar con la amenaza terrorista, debe hacer frente a la crisis de ‘Windrush’ que estalló hace dos semanas por el maltrato institucional a los inmigrantes afrocaribeños que llegaron al país tras la Segunda Guerra Mundial para cubrir la demanda laboral del país, y a los que las sucesivas normas migratorias han ido castigando hasta prácticamente no reconocerles ningún derecho. El diario británico The Guardian publicó una carta en la que Rudd informaba a la primera ministra de su intención de deportar un 10% más de inmigrantes ilegales «en los próximos años», un objetivo «ambicioso pero alcanzable».