Trump baraja "todas las opciones" para forzar la salida de Maduro del Gobierno de Venezuela
Donald Trump reafirma su postura con respecto a la crisis de Venezuela
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha reafirmado este martes su postura frente a la crisis venezolana y ha asegurado que evalúa «todas las opciones» para forzar la salida de Nicolás Maduro del Gobierno de Venezuela. Trump no reconoce al líder chavista como presidente de Venezuela, al considerar fraudulento el resultado de las elecciones de 2018 que renovaron su mandato.
«Todas las opciones están sobre la mesa», ha declarado Trump, según informa AFP, durante la visita de su homólogo brasileño, Jair Bolsonaro, otro de los grandes detractores de Maduro. Con estas declaraciones, el líder estadounidense deja la puerta abierta a una intervención militar.
Estados Unidos y Brasil han presionado a Maduro para que abandone el poder, al considerar «ilegítima» su reelección. Asimismo, han mostrado su apoyo al líder opositor Juan Guaidó, reconocido por más de 50 países como presidente encargado de Venezuela, quien intenta movilizar al pueblo por la «libertad».
La petición de Trump y Bolsonaro es que Guaidó encabece un gobierno provisional para la celebración de unas nuevas elecciones presidenciales, a las que Maduro ya se ha negado. «Es una vergüenza lo que está pasando en Venezuela, la deuda, la destrucción y el hambre», ha dicho Trump sobre la crisis venezolana.
Por su parte, Maduro ha anunciado una “reestructuración profunda” de su gabinete de Gobierno para “blindar la patria” ante cualquier amenaza. “El presidente Nicolás Maduro ha solicitado a todo el Gabinete Ejecutivo poner sus cargos a la orden a los efectos de una reestructuración profunda de los métodos y funcionamiento del Gobierno bolivariano para blindar la Patria (…) ante cualquier amenaza!”, apuntó la vicepresidenta Delcy Rodríguez el pasado lunes.
Venezuela se encuentra en medio de una profunda crisis que va más allá de un enfrentamiento político. La hiperinflación, la escasez de medicinas y alimentos, y los fallos en los servicios públicos forman parte de la rutina de los venezolanos, a quienes un apagón dejó cinco días sin electricidad.