El médico del francés en estado vegetativo anuncia que detendrá su tratamiento
El médico del francés Vincent Lambert, tetrapléjico en estado vegetativo desde hace más de una década que se ha convertido en símbolo del debate sobre la eutanasia, ha anunciado a la familia que detendrá su tratamiento en los próximos días para dejarle morir.
El médico del francés Vincent Lambert, tetrapléjico en estado vegetativo desde hace más de una década que se ha convertido en símbolo del debate sobre la eutanasia, ha anunciado a la familia que detendrá su tratamiento en los próximos días para dejarle morir.
Lambert sufrió en 2008, cuando tenía 32 años, un accidente automovilístico y los médicos verificaron que los daños cerebrales eran irreversibles. Su caso desgarra a la familia desde hace seis años: por un lado los padres, un hermanastro y la hermana de Lambert se oponen que cesen los cuidados; por el otro, la esposa de Lambert, Rachel, su sobrino y cinco hermanos y hermanas denuncian un ensañamiento terapéutico.
El caso se ha convertido en Francia en modelo del debate sobre los tratamientos de final de vida y la muerte digna.
Los abogados de los padres de Lambert, Jean Paillot y Jérôme Triomphe, han informado a EFE de que el doctor Sanchez del hospital de Reims les ha comunicado su intención de ejecutar la decisión que tomó hace un mes de desconectar a Lambert. La interrupción del tratamiento se produciría, según esa fuente, en la semana que comienza el próximo 20 de mayo.
El 24 de abril, el Consejo de Estado —máxima instancia de la justicia administrativa— concluyó que «se reunían las diferentes condiciones para que la decisión de suspender la nutrición y la hidratación artificiales de Vincent Lambert puede ser aplicada».
Los abogados señalan que «si esa decisión se ejecutase, Lambert moriría en unos días«. Los padres de Lambert alegan que el paciente aún puede recuperarse en caso de que pueda recibir un mejor tratamiento.
Diversas instancias de la justicia francesa se han puesto de lado de los médicos de Lambert, pero los padres no han dejado de batallar el caso hasta la fecha.
Tras la decisión del Consejo de Estado, los padres de Lambert recurrieron al Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) y al Comité de la ONU de los derechos de las personas con discapacidad.
El TEDH avaló la decisión del órgano francés, pero el Comité de la de los derechos de las personas con discapacidad pidió a Francia que suspendiera cualquier decisión de poner fin a los cuidados del enfermo, mientras examinaba el fondo del caso.
Para los abogados, «no hay ninguna urgencia médica para interrumpir la alimentación y la hidratación de Lambert, y nada justifica una violación tan desvergonzada del derecho internacional y de las medidas provisionales reclamadas por la ONU».
Lambert, de 42 años y enfermero psiquiátrico de profesión, sufrió un accidente de tráfico en 2008. El traumatismo craneoencefálico le dejó tetrapléjico y absolutamente dependiente. En 2011, los médicos descartaron toda posibilidad de mejora y en 2014 su estado fue calificado de vegetativo.
Sus padres, de profundas creencias religiosas, siempre han defendido su derecho a la vida y consideran que desconectarle supondría un trato inhumano o degradante, por lo que en los últimos años han agotado los recursos judiciales posibles.