El PPE rechaza al socialista Timmermans como presidente de la Comisión y la UE sigue sin altos cargos
El PPE no es el único que se opone al nombramiento de Timmermans, que también se enfrenta al rechazo de los mandatarios de Polonia, Hungría y República Checa
Tras mantener reuniones durante toda la madrugada de este lunes, los líderes de la Unión Europea no han logrado repartir los altos cargos del bloque debido a la falta de acuerdo entre los diferentes partidos. Finalmente, la cumbre ha sido suspendida hasta el martes, según ha informado el portavoz del presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk.
Antes de la cumbre, las esperanzas estaban puestas en el llamado acuerdo de Osaka, un pacto alcanzado en Japón entre los líderes de Francia, Alemania, Países Bajos y España que cedía la presidencia de la Comisión Europea al candidato socialdemócrata, el holandés Frans Timmermans.
Sin embargo, los miembros del Partido Popular Europeo (PPE), primera fuerza en las elecciones europeas del 26 de mayo, han rechazado este pacto antes de la cumbre. «Como PPE, no hemos aprobado el paquete que se negoció en Osaka», aseguró a su llegada a la cumbre el primer ministro irlandés, Leo Varadkar, y aseguró que la mayoría de mandatarios de esta familia abogan por no dejar caer a su candidato a la Comisión, Manfred Weber, «tan fácilmente».
Tras este rechazo, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, ha comenzado una ronda bilateral poco antes de la medianoche en la que ha sondeado si varios miembros del PPE obtendrían la mayoría necesaria para presidir la Comisión Europea, pues la opción de Timmermans con Weber al frente de la Eurocámara seguía sobre la mesa.
Sin embargo, las negociaciones han fracasado y a las 05:30 horas, Tusk ha comenzado una segunda ronda de contactos bilaterales para tratar de llegar a un acuerdo antes de reunir de nuevo a todos los mandatarios.
El PPE no es el único que se opone al nombramiento de Timmermans, que también se enfrenta al rechazo de los mandatarios de Polonia, Hungría y República Checa, que consideran que es “un candidato muy divisivo que no entiende Europa central”, según el polaco Mateusz Morawiecki.
Estos tres países únicamente no podrían bloquear solos la designación del socialdemócrata, pero, junto a otros países, podrían comprometer su nombramiento, que necesita el voto de al menos 21 de los 28 mandatarios cuyos países representen el 65% de la población del bloque, informa AFP.
Esta cumbre fue convocada después de que la celebrada del 21 de junio acabara sin un acuerdo sobre la renovación de la jefatura de las principales instituciones europeas.