El líder de la oposición rusa Alexéi Navalni ha dicho este martes que ya es capaz de respirar sin ayuda, en sus primeras declaraciones tras haber sido envenenado el mes pasado en Siberia.
En contexto: Alexéi Navalni se encuentra ingresado en una clínica alemana después de haber sido envenenado con Novichok en Siberia, según aseguran Alemania, Francia y Suecia, unos hechos que Rusia niega. Hasta ahora, ha estado en coma inducido y, después, con asistencia para respirar.
«Ayer fui capaz de respirar por mis propios medios todo el día», ha dicho el líder de la oposición en una publicación en Instagram en la que aparece con su esposa sentado en su cama en el hospital de Berlín al que fue trasladado para ser tratado.
«Me ha gustado mucho, es un procedimiento sorprendente y subestimado por muchos. Lo recomiendo», bromea Navalni, que dice a sus seguidores que los «extrañaba», una semana después de haber salido del coma al cual había inducido.
El principal opositor del Kremlin podrá muy pronto abandonar por completo la «ventilación artificial», ha explicado el hospital Charite de Berlín, donde es tratado.
Un laboratorio alemán concluyó el 3 de septiembre que Navalni, de 44 años, fue envenenado con un agente neurotóxico del tipo Novichok, concebido con fines militares en la época soviética, lo que Moscú rechaza. Además, un laboratorio francés y uno sueco anunciaron el lunes haber confirmado las conclusiones alemanas.