El juez pide al Supremo que impute a Pablo Iglesias por el ‘caso Dina’
García Castellón considera que el vicepresidente del Gobierno fingió de forma “consciente y planificada”
El titular del Juzgado Central de Instrucción nº6 de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón, ha solicitado al Tribunal Supremo la imputación del vicepresidente del Gobierno por presuntos delitos de revelación de secretos, con agravante de género, daños informáticos, denuncia falsa y simulación de delitos en su gestión de la tarjeta del móvil sustraído a Dina Bousselham, exasesora de Podemos. El magistrado considera que Pablo Iglesias utilizó de forma fraudulenta este proceso para intentar lograr algún tipo de ventaja electoral.
En la exposición razonada, de 63 folios, remitida a la Sala Penal del Supremo, el juez imputa los mismos delitos a Gloria Elizo, vicepresidenta del Congreso y diputada de Podemos y a Raúl Caballedo, abogado del partido. Del mismo modo, el magistrado también imputa delitos de falso testimonio a Dina Bousselham y a su expareja, Ricardo Sà Ferreira.
El juez relata que, bajo instrucciones dadas por Iglesias, y con la aprobación de la dirección de la asesoría jurídica del partido morado, presentaron la desaparición del teléfono “como un encargo realizado por el Gobierno del PP al excomisario Villarejo, para publicar en el digital ‘Ok Diario’, en el contexto de una campaña para perjudicar a Iglesias, y por ende a Podemos”.
Motivos de la investigación
En el auto, el juez explica que el origen de este procedimiento es el robo del teléfono móvil de Bousselham el 1 de noviembre de 2015, el cual, contenía una tarjeta de memoria mini SD. Dos años más tarde, tiene lugar la entrada y registro en la vivienda de Villarejo, en la que aparecen un disco duro con dos carpetas, ‘DINA 2’ y ‘DINA 3’, y otro pendrive con las mismas carpetas.
La investigación apunta que el contenido de la tarjeta llegó a Villarejo a través de Luis Alberto Pozas y Luis Rendueles, director y subdirector de la revista ‘Interviú’, quienes, a su vez, entregaron una copia al director del Grupo Planeta, Antonio Asensio.
Castellón señala que Pablo Iglesias recibió la tarjeta de memoria original mini SD por parte de Antonio Asensio el 20 de enero de 2016 y comprobó que en ella había archivos personales de Dina Bousselham y de carácter muy íntimo. “Pese a ello se guardó la tarjeta en su poder, sin decírselo a la propietaria aun cuando ambos eran personas cercanas y el conocimiento que tenía de la desaparición de los objetos de Dina desde noviembre de 2015”, explica el auto. Según la resolución, esto puede deberse al conocimiento que Iglesias tuvo al observar el contenido de la tarjeta micro SD, en la que también había capturas de pantalla que la asesora guardaba de conversaciones de grupos de mensajería en los que aparecía él.
El magistrado afirma que otro punto clave se produce cuando Pablo Iglesias devolvió a Dina la tarjeta y advierte de que, aunque no se ha podido determinar exactamente la fecha de la devolución, todo indica que fue antes del 23 de agosto de 2017. “Se sabe que cuando se devuelve la tarjeta está inservible para su funcionamiento”, añade.
Además, otro hecho destacado es que, en julio de 2016, se publican en ‘Ok Diario’ varias noticias en las que aparecen imágenes procedentes del dispositivo de Dina, momento en que Pablo Iglesias guardaba la tarjeta en su poder.
El juez ha publicado otro auto en el que acuerda continuar el procedimiento contra el excomisario José Villarejo, Alberto Pozas y Luis Rendueles, por delito de encubrimiento y revelación de secretos.
Una denuncia falsa
El juez sostiene que, con la única finalidad de desprestigiar al digital dirigido por Eduardo Inda, y de acuerdo con Gloria Elizo y con la participación de los letrados Raúl Carvalledo y Marta Flor Nuñez: «A sabiendas del origen de las imágenes publicadas en ‘Ok Diario’, el aforado Pablo Iglesias insta a los servicios jurídicos del partido a ampliar la denuncia inicial formulada por Bouselham, tratando de disimular falsariamente, una conexión entre las imagen publicadas en el digital y la desaparición del teléfono el 1 de noviembre de 2015”. “Pese al conocimiento de su falsedad y puestos de común acuerdo; el aforado, secretario general de Podemos; la responsable de los servicios jurídicos del partido, la sra. Elizo y la letrada del partido, Marta Flor Nuñez, como ejecutora material, simulan que la publicación de las imágenes en el semanario ‘Ok Diario’ durante los días 21 y siguientes del mes de julio, fue el resultado de un encargo realizado al Sr. Villarejo para perjudicar a Pablo Iglesias Turrión», añade el auto apuntando también que su denuncia tenía una finalidad “estrictamente de oportunidad política”.
Dina podría exculparle
Además, el juez destaca la comparecencia de Dina Bouselham, el 26 de marzo de 2019, que en calidad de testigo perjudicada faltó a la verdad de sus manifestaciones. Lo mismo hizo su marido tres días más tarde.
«Ambos hechos se entienden conexos a la actuación desplegada por los servicios jurídicos del partido Podemos para construir ante el órgano judicial un relato coherente con las instrucciones dadas por el aforado, secretario general del Partido», concluye el magistrado.
García Castellón explica que el delito de descubrimiento y revelación de secretos requiere denuncia de la persona agraviada, que en este caso sería Dina.