El juez estudia la presunta financiación irregular del PP de Madrid, con Esperanza Aguirre, Ignacio González y Cristina Cifuentes imputados
El extesorero del PP Luis Bárcenas seguirá declarando este miércoles ante un juez sobre el que fuese su partido tras aludir a su presunta «contabilidad paralela» en el escrito en el que prometió colaborar, y esta vez lo hará en el caso Púnica, donde se investiga si el PP de Madrid se financió irregularmente.
Bárcenas ya declaró la semana pasada por videoconferencia en la investigación sobre el supuesto operativo «parapolicial» orquestado en 2013 para espiarle a él y a su familia en busca de documentos comprometedores para dirigentes del PP, conocido como caso Kitchen.
En esta ocasión, el extesorero del PP, que cumple condena por el caso Gürtel en la cárcel de Soto del Real (Madrid), está citado de forma presencial a las 16.00 horas para declarar como testigo ante el juez que instruye el caso Púnica, una de las principales causas de corrupción que investiga la Audiencia desde hace años.
Entre las piezas de este procedimiento figura la número nueve, relativa a la presunta financiación irregular del PP de Madrid, donde están imputados varios expresidentes regionales como Esperanza Aguirre, Ignacio González o Cristina Cifuentes.
Bárcenas, que llevó las cuentas del PP durante años, está citado como consecuencia de la carta que envió a finales de enero a la Fiscalía anunciando su «voluntad» de colaborar con la Justicia, decepcionado por que no se cumpliese la promesa, que asegura se le hizo desde el que fuera su partido, de librar a su mujer, Rosalía Iglesias, de la cárcel, donde también cumple condena por Gürtel.
En aquel escrito, enmarcado en el pago de las obras de la sede del PP con dinero de la presunta caja B del partido, aseguraba que Rajoy se deshizo en una máquina «destructora de papeles» de documentos que reflejaban esa supuesta contabilidad paralela sin saber que él guardaba una copia.
El extesorero, que también extendía esa anunciada intención de colaborar al caso Púnica, habló de un sistema «institucionalizado» de financiación del PP con «percepciones en B» a través de donativos existente desde 1982, y situó al expresidente del Gobierno y líder del partido Mariano Rajoy entre los exdirigentes que, dijo, percibieron sobresueldos extraídos de esta presunta caja B.
Por ese supuesto pago con dinero negro de las obras de la sede del PP en la calle Génova de Madrid, Bárcenas se sentará en el banquillo de los acusados el 1 de marzo, día en que se reanuda el juicio después de que un encausado diese positivo por coronavirus.
La Fiscalía pide cinco años de prisión para él por un delito fiscal, otro de falsedad y un tercero de apropiación indebida.