Podemos pedirá en el Congreso una condena del "terrorismo callejero ultra" y los discursos de Vox
Unidas Podemos enmarca en ese «terrorismo callejero» los ataques a sus sedes de Cartagena y Gijón.
Unidas Podemos enmarca en ese «terrorismo callejero» los ataques a sus sedes de Cartagena y Gijón
Unidas Podemos llevará el próximo martes al Pleno del Congreso, en plena campaña de las elecciones madrileñas del 4 de mayo, una iniciativa de condena del «terrorismo callejero» que, según denuncia, está llevando a cabo «la ultraderecha» con «actos violentos» que son alentados, desde su punto de vista, con «discursos incendiarios» como los de Vox, aunque no menciona expresamente a esta formación.
En su iniciativa, este grupo parlamentario plantea también que la Cámara exprese su «firme rechazo» al ataque a la sede de Podemos en Cartagena que tuvo lugar hace unas semanas.
Unidas Podemos busca una censura del hemiciclo a los «numerosos actos violentos llevados a cabo por la ultraderecha en los últimos meses» así como la «repulsa» a los «discursos de odio» con los que se fomentan este tipo de acciones».
Valores del antifascismo
En este contexto, plantea que el Congreso se ratifique «en la defensa de la democracia, la justicia social y los derechos humanos» e inste al Gobierno a «llevar a cabo las actuaciones necesarias para promover la realización de los derechos humanos y los valores democráticos del antifascismo».
Unidas Podemos no cita expresamente a Vox en su iniciativa, pero sí señala la «gran responsabilidad» que, a su juicio, tienen en el auge de la violencia ultra los partidos que hacen «discursos incendiarios» de odio al diferente y al que no piensa como ellos.
«Son los mismos que ponen en cuestión al Gobierno de España, la representatividad y pluralidad de los partidos políticos que componen el Congreso, la defensa de los derechos humanos y, en última instancia, el propio sistema democrático», argumentan en referencia a los de Santiago Abascal.
En este sentido, pide «acabar con la impunidad de los responsables de la violencia ultraderechista y todos aquellos amparan y legitiman sus ataques», mediante la condena de estos hechos para «acabar con el blanqueamiento del fascismo».
Unidas Podemos enmarca en ese «terrorismo callejero» los ataques a sus sedes de Cartagena y Gijón, así como a una asociación de vecinos de Leganés (Madrid) y al local de la colectivo LGTBI (COGAM) en el barrio madrileño de Chueca.