Aragonès quiere negociar con Sánchez una "solución al conflicto político" catalán y el reparto de los fondos UE
Tras haber tomado posesión como nuevo presidente, Pere Aragonès ha explicado que «en los próximos días» prevé tener «una llamada de trabajo» con Sánchez
Tras haber tomado posesión como nuevo presidente, Pere Aragonès ha explicado que «en los próximos días» prevé tener «una llamada de trabajo» con Sánchez
El nuevo presidente de la Generalidad, Pere Aragonès, espera negociar con el Gobierno de Pedro Sánchez «una solución al conflicto político» catalán y el reparto de los fondos europeos para la reconstrucción tras la pandemia de la covid.
En declaraciones a Catalunya Ràdio, después de haber tomado posesión el lunes como nuevo presidente, Aragonès ha explicado que «en los próximos días» prevé tener «una llamada de trabajo» con Sánchez para mantener una «conversación tranquila» sobre la reanudación de la mesa de diálogo, paralizada desde febrero de 2020.
Aragonès quiere abordar con el presidente del Gobierno «cómo comenzar esta negociación para detener la represión y trabajar por una solución al conflicto político», que, a su juicio, debe pasar por una «amnistía y la autodeterminación», además de hablar sobre los fondos Next Generation, para los que «Cataluña tiene una batería de propuestas».
Aragonès, sobre los indultos: «Toda medida que alivie dolor será bienvenida»
El nuevo presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha asegurado este martes que los indultos para los líderes independentistas presos serían una buena noticia: «Cualquier medida que ayude a aliviar el dolor de los presos políticos y de sus familias vamos a recibirla bien, será bienvenida», ha dicho. En cualquier caso, ha incidido en que la «causa general contra el independentismo va más allá», por lo que «la solución a una causa general es una amnistía», algo en lo que coinciden el resto de partidos soberanistas.
Aragonès se ha pronunciado así tras reunirse con los responsables del equipo de psiquiatría infantil del Servicio de Salud Mental del Hospital Parc Taulí de Sabadell (Barcelona), en el primer acto desde su toma de posesión como presidente de la Generalitat este lunes.
Pese a ver con buenos ojos los posibles indultos a los líderes del procés presos, Aragonès ha recordado que existen causas abiertas en el Tribunal de Cuentas y en el juzgado número 13 de Barcelona contra el independentismo, por lo que ve necesaria una «amnistía».
Después de cruzarse este pasado fin de semana con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mensajes «cordiales» de felicitación por su investidura como presidente catalán, Aragonès prevé mantener «en los próximos días» una «conversación tranquila» con él. Además de abordar con Sánchez cómo resolver el «conflicto político con el Estado», Aragonès también quiere tratar con él la gestión de los fondos europeos frente a la pandemia de la COVID.
El Gobierno espera al informe del Tribunal Supremo -responsable de la sentencia del ‘procès’ para tomar una decisión. El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, pidió este lunes ver con «naturalidad» el indulto a los líderes del ‘procés’ tanto si se concede como si no, o si se concede de forma «parcial o total». Unas palabras muy criticadas por la oposición, ya que el PP y Ciudadanos anunciaron un recurso en caso de que los presos independentistas sean indultados y Vox anunció por su parte movilizaciones a modo de protesta.
JxCat, la CUP y el PDeCat insisten en la amnistía
El resto de formaciones soberanistas, sin embargo, recela del indulto y ve en la amnistía la única solución para los presos. La portavoz de Junts en el Congreso, Miriam Nogueras, ha advertido en rueda de prensa de que «sólo cabe la amnistía». «No hemos llegado hasta aquí para pedir perdón porque hemos ejercido nuestro derecho legítimo a ser el país que queremos ser a través de las urnas», ha insistido Nogueras, para quien la solución al «conflicto político» que se vive en Cataluña pasa por el diálogo, por la amnistía y por «el derecho a la autodeterminación».
La diputada de la CUP en el Congreso, Mireia Vehí, ha insistido también en que los indultos a los presos condenados por el ‘procés’ «no son una solución política», pues deja fuera a otras 3.000 personas que a su juicio han sido «represaliadas» desde 2014, y en ese sentido ha vuelto a cargar contra el PSOE por frenar en la Cámara el debate sobre la Ley de Amnístía para todos los condenados por el proceso independentista.
Y el portavoz del PDeCAT en el Congreso, Ferrán Bel, ha dicho por su parte que su partido -escindido de JxCat y sin representación en Cataluña- daría valor a que el Gobierno indultara a los líderes independentistas encarcelados por su implicación en el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017, pero ha insistido en que sería sólo «un paso adelante pequeño» porque, a su juicio, la solución pasa por la amnistía de todos los procesados y condenados desde 2014.
PNV, Bildu, Más País y Compromís apoyan el indulto
Otros socios del Gobierno de Pedro Sánchez en el Congreso han respaldado la posibilidad de que el Ejecutivo indulte a los independentistas encarcelados por el ‘procès’. En concreto, se han posicionado a favor el PNV, EH-Bildu, Más País y Compromís.
Aitor Esteban (PNV) considera que el primer paso para resolver la cuestión es que «los presos políticos salgan de prisión». Aboga por hacer «pedagogía» y no «política de regate corto», como a su juicio hace el PP amenazando con llevar a los tribunales esta decisión. También ha dicho que le «indigna» que se considere «golpismo» y un delito al «procés» porque solo se ha promovido un referéndum y cree que a España «le faltan bastantes hervores democráticos» si exige al independentismo que renuncie a sus aspiraciones de una Cataluña independiente o de poder votar.
La portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurua, ha expresado su respeto a la posición del independentismo y ha sostenido que «al margen de los indultos» la «cuestión» de Cataluña debe resolverse mediante diálogo y acuerdo. Considera que los políticos catalanes «nunca» deberían haber sido inhabilitados porque ello supone inhabilitar y castigar a la ciudadanía «por los votos que les han dado», y ha advertido de que con un 52 % de votos el problema va a seguir ya que «las realidades no cambian porque alguien quiera que cambie y en democracia las cosas se resuelven hablando y dialogando».
Por su parte, Íñigo Errejón (Más País) y Joan Baldoví (Compromís) ven los indultos como una herramienta que permita resolver una crisis que es política, no de orden público. «La solución del problema es más importante que el castigo a personas que han vulnerado el Código Penal español, pero que lo han hecho de manera pacífica», ha sostenido Errejón y, en la misma línea, Baldoví ha pedido valentía al Gobierno