(VÍDEO) Captan el momento en el que una bola de fuego sobrevuela el sur peninsular
El fenómeno se ha producido cuando una roca procedente de un asteroide potencialmente peligroso ha entrado en la atmósfera terrestre a 50.000 km/hora
El fenómeno se ha producido cuando una roca procedente de un asteroide potencialmente peligroso ha entrado en la atmósfera terrestre a 50.000 km/hora
Los detectores del proyecto SMART, del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC), han registrado el paso de una bola de fuego por el sur peninsular a 50.000 km/hora.
Según el análisis del investigador principal del proyecto SMART, José María Madiedo, del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC), la bola de fuego fue grabada el lunes a las 23:33 horas y fue vista por multitud de testigos, la mayoría de ellos ubicados en las provincias de Sevilla, Málaga y Cádiz.
El fenómeno se ha producido al entrar en la atmósfera terrestre, una roca procedente de un asteroide potencialmente peligroso (el asteroide 2004 HW) a 50.000 kilómetros por hora.
El brusco rozamiento con la atmósfera a esta enorme velocidad hizo que la roca se volviese incandescente, generándose así una bola de fuego que se inició a una altitud de unos 83.000 kilómetros sobre el suroeste de la provincia de Málaga, prácticamente sobre la vertical de la localidad de Alcorrín.
Desde allí avanzó en dirección noreste, mostrando varias explosiones a lo largo de su trayectoria.
Finalmente se extinguió a una altitud de unos 38.000 kilómetros sobre el este de la provincia de Sevilla, cerca de la vertical de la localidad de Casariche.
En ese punto la roca se destruyó completamente en la atmósfera sin que ningún fragmento consiguiese llegar al suelo ni supusiera riesgo alguno.
La bola de fuego fue captada desde los observatorios astronómicos de Sevilla, La Sagra y Sierra Nevada (Granada), Calar Alto y La Hita (Toledo).
Los detectores del proyecto SMART operan en el marco de la Red de Bólidos y Meteoros del Suroeste de Europa (SWEMN), que tiene como objetivo monitorizar continuamente el cielo con el fin de registrar y estudiar el impacto contra la atmósfera terrestre de rocas procedentes de distintos objetos del Sistema Solar.