El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha respaldado este viernes ante el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la vía del diálogo para intentar resolver conflictos como el de Cataluña, así como que se faciliten las condiciones para que ese diálogo pueda fructificar.
En contexto: Sánchez ha recibido a Guterres en el Palacio de la Moncloa en el marco de una visita de dos días a España y que ha incluido una reunión con el rey. Tras firmar en el libro de honor de la sede de la Presidencia del Gobierno, el máximo representante de Naciones Unidas y el jefe del Ejecutivo han comparecido ante los informadores y han coincidido en la necesidad de apostar por el multilateralismo como la clave esencial para hacer frente a los retos que tiene el mundo ante sí.
La visita de Guterres a España en medio del proceso abierto por el Gobierno para intentar reconducir la situación en Cataluña ha hecho que esta sea una cuestión por la que los periodistas han preguntado al secretario general de la ONU. Al pedir su opinión por la posibilidad de que los indultos concedidos a nueve dirigentes independentistas sean el camino adecuado para solucionar el problema catalán y al preguntarle si la ONU avala el derecho a la autodeterminación, ha señalado que no es propio de su cargo comentar cuestiones de carácter interno de España.
Pero a renglón seguido ha hecho una defensa del diálogo como el mejor modo de resolver este tipo de problemas y apostando por la senda política. En esa línea, ha destacado la importancia de crear las condiciones adecuadas para que ese diálogo pueda fructificar y ha dicho que eso es de gran relevancia en todas las sociedades.
Sánchez ha insistido a continuación en su apuesta por la convivencia como objetivo central de los indultos y del proceso abierto con el Govern y ha aclarado que, al igual que está en contra de un referéndum de autodeterminación, tampoco prevé un referéndum consultivo como el que podría avalar el artículo 92 de la Constitución.
Las intervenciones iniciales de los dos comparecientes se han centrado en la forma de hacer frente a los retos globales, que han considerado que pasa por un multilateralismo cuya defensa, por parte de España, Guterres ha calificado de «ejemplar». Ha destacado igualmente la «cooperación excepcional» de España y la calidad de los organismos de la ONU con sede en este país como el centro de Información y Comunicaciones de la ONU que visitó este jueves en Quart de Poblet, Valencia.
Guterres ha señalado que problemas como el cambio climático o la pandemia han puesto de manifiesto la importancia de la colaboración internacional y ha agradecido el apoyo y papel de España como «país puente, del norte y con credibilidad en el sur». Tras destacar el «coraje y la resiliencia» demostrada por España ante la pandemia, ha apelado a doblar la producción de vacunas, mejorar su distribución y colaborar con los países menos desarrollados para que accedan a ellas.
Sánchez ha reiterado por su parte el «compromiso firme e inequívoco» de España con la agenda multilateral, necesaria para «articular respuestas globales a problemas globales» y ha señalado que las leyes y políticas que impulsa su Gobierno «están alineadas» con las de la ONU. «Aquí tienes un Gobierno amigo y comprometido» ha añadido dirigiéndose a Guterres, a quien ha felicitado por la renovación de su mandato al frente de la ONU y su liderazgo para lograr respuestas comunes a asuntos como el cambio climático, la pandemia o los movimientos migratorios.
En la comparecencia, el secretario general de Naciones Unidas ha hecho un llamamiento para que el próximo candidato a enviado especial de la ONU para el Sáhara Occidental sea bien acogido por las partes tras 13 nombramientos rechazados. A su juicio, es absolutamente esencial lanzar el diálogo político «para hacer frente a todas las frustraciones que existen por una crisis que aún no tiene salida».
La plaza de enviado especial de la ONU para el Sáhara está vacante desde mayo de 2019 dada la falta de acuerdo en el Consejo de Seguridad y entre las partes del conflicto, mientras que la tensión ha vuelto a aumentar sobre el terreno, con choques armados y el Polisario declarando la ruptura del alto el fuego.