Surgen dudas sobre quién estuvo detrás de la muerte del presidente de Haití: podría haber sido asesinado por sus propios guardias
La narrativa oficial de Haití sobre el asesinato de su presidente, Jovenel Moïse, quien fue asesinado a tiros en su mansión en Puerto Príncipe el miércoles pasado, está en entredicho. Si bien las mismas fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado han asegurado que Moïse fue asesinado por miembros de un escuadrón de asalto predominantemente colombiano que irrumpió en la residencia del presidente en una colina, ahora esta versión está puesta en duda.
La oposición: mientras la incertidumbre se apodera del país caribeño y las calles de la capital permanecen inquietantemente tranquilas en medio de temores de que Haití se esté adentrando en una nueva fase de agitación política y social, los políticos de la oposición y los informes de los medios en Haití y Colombia ponen en duda esa versión y aseguran que Moïse fue asesinado por sus propios guardias.
El viernes, Steven Benoit, un destacado político de la oposición y exsenador, dijo a la radio local Magik9 que el presidente «fue asesinado por sus propios guardias, no por los colombianos». A su vez, un informe de la revista colombiana Semana, citando una fuente anónima, sugirió que los ex soldados colombianos habían viajado a Haití después de ser contratados para proteger a Moïse, quien supuestamente había estado recibiendo amenazas de muerte. Y para aumentar aún más el misterio, el periódico colombiano El Tiempo afirmó que una fuente le había dicho que las imágenes de seguridad del recinto presidencial muestran a los agentes colombianos llegando allí entre las 2.30 y las 2.40 de la madrugada del miércoles. «Eso significa que llegaron una hora y media después del crimen contra el presidente», se lee en el medio.
El viernes, las autoridades colombianas detuvieron a 13 de los presuntos mercenarios colombianos que participaron en la muerte de Jovenel Moïse. Entre ellos se encontraba Manuel Antonio Grosso Guarín, ex miembro de una unidad de élite del ejército colombiano llamada Grupo de Fuerzas Especiales Antiterroristas Urbanas, que se especializa en el manejo de enfrentamientos con rehenes y la protección de personalidades importantes.
Grosso, de 41 años, habría llegado a Haití con 10 ex soldados el 6 de junio después de viajar A Punta Cana en República Dominicana, que comparte la isla Hispaniola con Haití. Un segundo grupo de ex soldados llegó a Haití aproximadamente un mes antes a través de Panamá.