La fractura del 'procés': la Lengua materna y TV3, los factores que marcan el apoyo a la independencia
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Catalanohablante, seguidor de TV3 y Catalunya Ràdio y residente, principalmente, fuera de Barcelona y su área metropolitana, así es el perfil del separatista catalán medio, según Sociedad Civil Catalana (SCC), que ha presentado el estudio Mapas de la fractura en Cataluña: votos, lengua, renta y medios de comunicación (2006-2021).
El informe de SCC constata que el consumo de determinados medios de comunicación así como la pertenencia al grupo lingüístico es determinante para calibrar el grado de apoyo al independentismo.
«En Cataluña tenemos identificadas tres grandes fracturas: lengua, renta y geográfica. Sobre todo los catalanohablantes, la clase media-alta, de rentas superiores y los residentes en zonas interiores de Cataluña, han abrazado y se han subido al procés. Estos datos son graves y nos llevan a la necesidad de hacer un esfuerzo de pedagogía especial con los sectores y segmentos catalanohablantes de la población», asegura a THE OBJECTIVE Fernando Sánchez Costa, presidente de SCC
En este sentido, en el grupo de personas con el catalán como lengua materna y que se informan a través de TV3 y Catalunya Ràdio (el 23,3% de los catalanes), el apoyo a la secesión es masivo, alcanzando el 85,8% de este segmento. «Lo que ha pasado sobre todo en Cataluña es que la población de ascendencia catalanohablante, generalmente de la Cataluña de interior, que ve medios de comunicación autonómicos, y también del Grupo Godó en buena medida, se ha corrido del catalanismo templado a posturas mucho más radicales y excluyentes», señala Sánchez Costa.
En el otro extremo, las personas que dicen tener el castellano como lengua materna e informarse a través de medios no regionales (un grupo en el que que se encuadra el 42,6% de la población), los independentistas apenas son el 16,7%. «La población castellanohablante prácticamente ha mantenido los mismos rasgos identitarios que tenía antes, no se ha radicalizado ni es más españolista, sigue manteniendo ese sentimiento de identidad dual», añade el presidente de SCC.
En un término medio se sitúan quienes tienen el castellano como lengua materna y ven medios regionales (el 11,3% de los catalanes), de los que el 58,8% de ellos apoya la secesión, y los que señalan el catalán como lengua materna y ven medios no regionales (el 13,9% de la población), en los que la cifra de apoyo al independentismo es del 60,9%.
«En Cataluña hemos vivido un nacional-populismo de clase media-alta, un chovinismo del bienestar. Aquellos que más bien son los privilegiados, que tienen una posición más cómoda en la vida, asumen un discurso y una retórica de víctimas, de oprimidos. Quizás porque no tienen otras necesidades tan urgentes abrazan un discurso identitario y radical, como una especie de horizonte de sentido en su vida», asegura Sánchez Costa a este medio. «Es llamativo que este discurso de la opresión lo haya desarrollado una de las poblaciones más ricas de Europa».
El informe de SCC también hace referencia al desigual apoyo al procés según el territorio, más apoyo en las zonas rurales frente a las urbanas. «Esto no aparece en el informe, pero las zonas que han abrazado el secesionismo son las zonas clásicamente carlistas de Cataluña y algunas de ellas franquistas. Hay una especie de mutación de un comunitarismo antiguo a un nuevo comunitarismo procesista».
Por último, también hay una brecha de edad en el apoyo al independentismo catalán. El presidente de SCC tiene claro que la juventud está «desconectando del procés progresivamente, está cansándose y viéndolo como algo antiguo y lejano a sus problemáticas». Y añade: «Eso da cierta esperanza».
