El rechazo al aplazamiento y a la petición de la Fiscalía de aportar otras pruebas marca la primera jornada del juicio a Villarejo
El caso Tándem gira en torno a tres supuestos encargos de espionaje efectuados a Villarejo y a sus colaboradores
El caso Tándem gira en torno a tres supuestos encargos de espionaje efectuados a Villarejo y a sus colaboradores
Una de cal y otra de arena en el juicio al excomisario José Villarejo. La Audiencia Nacional ha echado por tierra su petición de aplazar la vista, al tiempo que ha impedido a la Fiscalía aportar otras fuentes de prueba que, en su opinión, evitarían eventuales nulidades.
La sección cuarta de lo Penal ha comenzado este miércoles el primer juicio del caso Tándem, que gira en torno a tres supuestos encargos de espionaje efectuados a Villarejo y a sus colaboradores, algunos de ellos policías, y por los que el excomisario afronta una petición fiscal de casi 110 años de prisión.
Son los proyectos Iron -un presunto espionaje de un despacho de abogados a otro de la competencia-, Land -en torno a la disputa familiar entre las herederas de la urbanización de lujo La Finca-, y Pintor -por otro espionaje que habrían encargado unos empresarios, entre ellos Juan Muñoz, marido de Ana Rosa Quintana-.
Junto a Villarejo, que estuvo más de tres años en prisión preventiva, están acusados una treintena de personas, incluidos antiguos mandos policiales como el también excomisario Enrique García Castaño, conocido como el Gordo; o Susana García Cereceda, hija del fallecido promotor de la citada urbanización.
La primera jornada, centrada en las cuestiones previas, ha comenzado con el intento de varias defensas de aplazar un juicio al que, según han recalcado, venían «a ciegas» porque no habían tenido acceso a toda la causa, incluidas las agendas que se intervinieron al excomisario y que han nutrido buena parte de las 30 líneas de investigación en las que se ha desgajado el caso Tándem.
El abogado de Villarejo, José Antonio García Cabrera, también ha criticado que haya informes policiales realizados «a espaldas de las partes» y ha reivindicado el derecho de su cliente, sentado a su lado durante buena parte del juicio y vestido con toga al ejercer como codefensor, «a saber qué hay» en ellos.
Tras reunirse unos minutos a deliberar, el tribunal ha rechazado aplazar la vista al estimar que tienen tiempo «de sobra» para consultar la información que reclaman dado que, tras la jornada de este jueves, no se reanudará hasta el 15 de noviembre, y les ha propuesto que acudan durante esos días a la Audiencia Nacional a examinar las agendas, y pidan aportarlas al juicio si lo estiman.
Pero las defensas no han sido las únicas que han visto sus peticiones desestimadas. También la Fiscalía Anticorrupción, que ha intentado sin éxito incorporar al juicio documentación que avalaría, en su opinión, los indicios para acordar algunos registros practicados en la causa y evitaría que las partes pudiesen «plantear cuestiones de nulidad».
Tras recibir el rechazo unánime de todas las defensas, que han criticado por «intempestiva» y «extemporánea» la solicitud, la presidenta de la Sala, Ángela Murillo, ha rechazado la petición del fiscal, quien, como el resto de acusaciones, ha denunciado «indefensión».
Lo que sí ha aceptado el tribunal ha sido incorporar, a petición de Anticorrupción, varias resoluciones relacionadas con el registro del domicilio de Villarejo en octubre de 2020, con la cadena de legalidad de varios oficios policiales y con el cotejo entre las agendas intervenidas al comisario y los informes que la Policía elaboró sobre ellas.
Aunque no ha llegado el turno de los acusados, Villarejo ha vuelto a reivindicar su inocencia ante los medios a la entrada al juicio y ha confiado en que no se le someta a «una justicia folclórica» porque, de lo contrario «sería como un linchamiento, como en el oeste».
Ya a la salida de esta primera sesión, el excomisario ha manifestado su sorpresa por el intento, según él, de «boicotear su función como letrado y ha señalado que ha encontrado cierta «predisposición de la Sala», que espera que con el tiempo «se vaya reconduciendo».
«Voy a respetar absolutamente la ley como he hecho toda la vida», ha proseguido para manifestar su confianza en que al final «la verdad resplandezca».
Esta jornada también ha estado marcada por la controversia generada a raíz de los acuerdos a los que ha llegado la Fiscalía con varios acusados, como los empresarios Muñoz o Susana García Cereceda, y a los que el resto de acusaciones ha restado validez por no haber participado en ellos.
La sorpresa ha venido asimismo por la ausencia de dos acusados en el banquillo. Mientras el abogado de uno de ellos, Francisco Carpintero, ha alegado motivos médicos, la defensa del otro, Juan Manuel León (al que la Fiscalía pide 12 años en la pieza Land), ha admitido desconocer su paradero pese a las gestiones realizadas para localizarle.
Circunstancia que también ha sido alegada por las defensas para fundamentar su petición de suspensión, pero que ha sido igualmente rechazada por el tribunal, que ha anunciado que responderá a esta cuestión cuando resuelva las distintas alegaciones expuestas por las partes.
Tras las dos primeras jornadas de juicio (fijadas para este miércoles y el jueves), la Sala había señalado para su continuación el 27 y 28 de octubre, pero finalmente se reanudará el 15 de noviembre en atención a la petición de la defensa de García Castaño, que tiene la vista de extradición del fundador de WikiLeaks Julian Assange, al que también defiende.
Fuente: EFE