Hallan el cuerpo sin vida de Pablo Sierra en la zona del río Guadiana donde se buscaba
Tal como adelantó THE OBJECTIVE, la Policía mantiene como línea principal de la investigación la muerte accidental del joven
La delegada del Gobierno en Andalucía, Yolanda García, ha señalado en una rueda de prensa que todo indica que el cadáver encontrado este viernes en el Rio Guadiana es el de Pablo Sierra. No obstante, la última palabra la tiene el Instituto Anatómico Forense de Badajoz, que realizará en las próximas horas la autopsia del cuerpo que los agentes de la Policía Nacional han hallado a primera hora de la mañana. La familia del joven también ha sido citada para identificar el cadáver.
Pablo Sierra fue visto por última vez en la calle Zurbarán de la capital pacense el jueves 2 de diciembre tras salir de copas con los amigos. El Grupo Especial de Operaciones (GEO) le buscaba desde hace tres días en la zona del Pico del río Guadiana, donde al día siguiente de su separación un militar encontró su teléfono móvil con restos de sangre, sobre los que no ha trascendido ningún dato más. En cualquier caso, tal y como adelantó THE OBJECTIVE, la Policía Nacional mantiene como línea principal de la investigación la muerte accidental del joven en la zona del río. «Pablo volvía caminando a casa, pero no sabemos por qué, se confundió de camino», han precisado.
El Pico fue el primer lugar en inspeccionarse tras la desaparición del estudiante por las unidades de los bomberos de Badajoz y la Guardia Civil. Una búsqueda que terminó el 5 de diciembre, pero que diez días después se reanudó de la mano de los buzos especializados de la Policía Nacional. Según ha confirmado la delegada del Gobierno, un perro de la unidad canina, especializado en desapariciones y que trabaja desde hace varios días en la zona, ha marcado una zona en el río. Tras lo que los agentes se han metido en el agua y han localizado el cuerpo a cinco metros de donde se encontró su móvil.
Tras informarles del hallazgo, la Policía Nacional ha citado a la familia de Pablo Sierra en las próximas horas en el Instituto Anatómico Forense de Badajoz para que proceda a la identificación del cadaver.
La decisión de volver a la cuenta del río Guadiana el pasado martes, según precisaron las fuentes consultadas a THE OBJECTIVE, respondía a la principal hipótesis que manejan en este momento los investigadores: que el joven pudo perder la vida tras un accidente en la zona del río.
Sus últimos pasos
Tras la desaparición del joven, el pasado 3 de diciembre, la primera posibilidad que barajó la Policía fue la de la marcha voluntaria. Una teoría que perdió peso conforme pasaron los días, a raíz de hallazgos policiales como el teléfono móvil con sangre o las declaraciones de testigos que le implicaban en una supuesta pelea, y que apuntaban a que terceras personas podían estar implicadas en su desaparición. Los investigadores, en cambio, ven este último supuesto cada vez más improbable.
Por un lado, distintos testigos aseguraron que vieron a Pablo Sierra en la madrugada del jueves al viernes en la calle Zurbarán, en Badajoz, desde donde se marchó para coger un autobús y volver a la residencia de Caja Badajoz, en la que vivía. Por otro, el dueño de un pub del centro de la capital pacense manifestó que el joven estuvo allí y abandonó el local a las 23:45. Poco antes, no obstante, añadió que tuvo un problema con otro joven en la puerta, pero que lo resolvió de forma amistosa. «Sus amigos se quedaron dentro», añadió antes de indicar que cuando se marchaba calle abajo, «tuvo un resbalón» en mitad de la calle, se levantó y siguió su camino.
El portavoz de la familia, Joaquin Amills, poco después, aportó más claridad sobre lo ocurrido en el establecimiento. Precisó que Pablo tropezó con otro chico, y eso hizo que se le cayera el teléfono móvil. «Inmediatamente, Pablo le dijo que no se preocupara, que le perdonara, que se hacía cargo de la reparación». Amills, en cambio, sí matizó que el desaparecido se fue del bar con un amigo, que lo acompañó un tramo de camino hasta que dijo que cogía un taxi.