El Gobierno vasco acelera la salida de los presos de ETA que realicen talleres en la cárcel
Las actividades contempladas incluyen la jardinería, la artesanía, los economatos o el servicio de bibliotecas
El Gobierno vasco ha anunciado la hoja de ruta a seguir en las prisiones de la comunidad tras haber adquirido la competencia sobre ellas. El plan incluye ventajas penitenciarias para los presos de la banda terrorista ETA, que podrán acceder a un tercer grado si se acogen al programa impulsado por la Consejería de Justicia por el que los reclusos pueden compaginar su pena con tareas en talleres de la prisión de jardinería, artesanía o economatos.
Estos talleres permiten que los presos de la banda puedan acogerse a una reducción de sus penas. A estos programas ya se han acogido casi la mitad de los 61 miembros de ETA que cumplen sus penas en régimen regular en las tres prisiones de País Vasco (Araba, Gipuzkoa y Bizkaia). El Gobierno vasco defiende que esta facilidad a la hora de acceder al tercer grado supone una forma de mejorar la convivencia en la comunidad.
Además, estos empleos son remunerados y tienen una pequeña asignación económica. Sin embargo, el diario El Mundo denuncian que fuentes consultadas señalan que los presos de la banda terrorista deciden optar a estos empleos no por falta de dinero, sino para reducir sus penas aprovechando esta política.
Estas acciones forman parte de la nueva política del Ejecutivo vasco, cuya consejera de Justicia vasca, Beatriz Artolazabal, ha explicado que la intención del su Gobierno es terminar con la «política penitenciaria de excepción» para los presos de la banda terrorista.
Aunque desde el Gobierno de la comunidad defienden que todos los presos pueden acceder a estos cursos, fuentes consultadas por el diario ABC señalan que existe una preferencia hacia los miembros de la banda terrorista: «Pasan por delante de muchos otros internos a la hora de acceder a talleres, porque ese es el primer paso para conseguir el tercer grado. No tendría que ser así».