ERC deja claro que no renuncia a la "desobediencia" si fracasa su apuesta por el "diálogo"
Los republicanos ponen sus esperanzas en la mesa de negociación con La Moncloa para avanzar hacia el «derecho a decidir» para Cataluña
Los republicanos ponen sus esperanzas en la mesa de negociación con La Moncloa para avanzar hacia el «derecho a decidir» para Cataluña
Diálogo y diálogo, pero sin renunciar a otras vías «alternativas», es la estrategia de ERC para solucionar el conflicto en Cataluña, según la hoja de ruta que el partido plantea para su Conferencia Nacional de marzo y en la que se contempla la «desobediencia» en caso de que la mesa de negociación fracase.
La formación republicana ha puesto en marcha este lunes su maquinaria interna que desembocará en una Conferencia Nacional los próximos 12 y 13 de marzo. Una ponencia que reafirma y «actualiza» la hoja de ruta del partido, manteniendo su apuesta por la vía del diálogo. «La mejor confrontación democrática es la mesa de negociación», ha dejado claro en rueda de prensa el coordinador de la propuesta, el exconseller Raül Romeva, vicesecretario general de prospectiva y Agenda 2030 de ERC.
La fórmula de Esquerra pasa así por la mesa Generalidad-Moncloa, acompañada de una «revitalización» del movimiento independentista, el impulso de la movilización social y el reto de lograr un consenso estratégico independentista, una triple ecuación que los de Oriol Junqueras consideran clave para el «éxito» de la negociación.
El documento incide en la importancia de que «la existencia del conflicto político sea reconocida por primera vez por parte del Gobierno español», un hecho «sin precedentes» que ofrece la oportunidad de abrir una negociación «que ponga fin a toda forma de represión y ofrezca a la ciudadanía de Cataluña el derecho a decidir».
«No renunciaremos a ningún instrumento»
Las cartas sobre la mesa de los republicanos siguen inamovibles, «amnistía y derecho de autodeterminación», en una partida con el Gobierno de Pedro Sánchez a la que se postulan con voluntad de «diálogo sincero y sin condiciones».
Pero la formación del presidente de la Generalidad, Pere Aragonès, matiza a continuación que «no es ingenua» y que debe estar preparada por si «la negociación no da los resultados esperados», por lo que aboga por construir «alternativas democráticas para afrontar el embate democrático».
¿Y eso qué significa? «No renunciamos ni renunciaremos a ningún instrumento democrático que nos permita decidir nuestro futuro colectivo para llegar a la ‘República Catalana’, de acciones de desobediencia política y social hasta de desbordamiento democrático para hacer posible el derecho a la autodeterminación», detalla ERC.
Fuente: EFE.