España se prepara para entrar en una fase de normalización del covid con la mascarilla en interiores como incógnita
Técnicos y políticos dibujarán un escenario que permitirá «gestionar esta enfermedad como cualquier otra del ámbito respiratorio»
Técnicos y políticos dibujarán un escenario que permitirá «gestionar esta enfermedad como cualquier otra del ámbito respiratorio»
El Ministerio de Sanidad y las comunidades tienen previsto alumbrar este jueves la nueva estrategia de control del covid-19, la hoja de ruta por la que se guiará la siguiente fase de la pandemia de la que queda por despejar una gran incógnita: cuándo y dónde se podrá quitar la mascarilla en interiores.
Con este fin llevan reunidos desde este miércoles en las ‘Jornadas del Sistema Nacional de Salud sobre Vigilancia en Salud Pública’ convocadas en Zaragoza representantes de los Gobiernos central y autonómico, primero los técnicos, que han propuesto los nuevos criterios con los que se debe manejar la crisis sanitaria, y hoy los consejeros y la ministra de Sanidad, Carolina Darias, que deberán refrendarlos.
De la nueva estrategia se sabe que estará centrada en los más vulnerables y su entorno y en los casos graves: se acabó el conteo diario de contagios, la realización de pruebas de diagnóstico de infección activa con carácter general, los rastreos o el aislamiento de los leves y asintomáticos.
Técnicos y políticos dibujarán un escenario que permitirá «gestionar esta enfermedad como cualquier otra del ámbito respiratorio», según explicó ayer la anfitriona del encuentro, la consejera aragonesa, Sira Repollés; para ello, será necesario modificar los sistemas de vigilancia de forma gradual y unificar criterios, que son los aspectos que están tratando estos dos días.
La mascarilla en interiores
La mascarilla es la última gran restricción que queda vigente de la fase aguda de la pandemia; a diferencia de otras como el pasaporte covid, que decidían las autonomías, su uso está regulado por real decreto, el último el del pasado 8 de febrero que levantó su imposición en exteriores.
Esta semana, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, volvió a insistir en que dejará de ser obligatoria en interiores «pronto, muy pronto», cuando así lo determine la ministra de Sanidad, aunque fuentes de su departamento aclaran que lo que estos días está sobre la mesa es la definición del nuevo sistema, no la retirada de las mascarillas, sobre la que no han debatido en la ponencia de alertas.
Que el fin de las mascarillas en espacios cerrados está cerca también lo vaticinó este miércoles mismo el director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, que auguró que podrían desaparecer «en un periodo corto de tiempo», pues «en lugares donde la misma gente interacciona cada día probablemente ya no tenga sentido». «Las mascarillas ya se podrían evitar en casi todos los escenarios», consideró.
Fuente: EFE.