Interior suprime 50 antidisturbios en Cataluña: indignación policial por «ceder con los indepes»

Un folio pegado en un tablón. Este fue el canal de difusión que utilizó la Jefatura de las Unidades de Intervención Policial (UIP), conocidas como los antidisturbios, para informar a los agentes en comisión de servicios en Cataluña de que su trabajo ya no sería necesario en dicho destino. Sin dar más explicaciones sobre esta decisión, según sostienen las fuentes consultadas por THE OBJECTIVE, la Policía Nacional decidió la semana pasada no prorrogar el refuerzo de 50 agentes que servía de apoyo a los dos grupos de la UIP en la comunidad autónoma desde hace una década.

Este recorte de efectivos, aseguran las mismas fuentes, «no estaba previsto». De hecho, la llegada del siguiente grupo, denominado Cobra y procedente de Oviedo, estaba aprobada en la planificación anual de las Unidades de Intervención Policial para suplir al conjunto de agentes que estaban destinados temporalmente en Cataluña desde el año pasado. Finalmente, no será así y la presencia de los antidisturbios quedará reducida a los dos grupos de la UIP catalana, compuestos por unos 85 agentes.

«Si esta unidad ya era una de las más mermadas…. ahora no sé cómo se va a llegar a todo el trabajo», sostienen desde la Unión Federal de Policía. Su portavoz, Jose María Benito, explica que desde «el Ministerio del Interior no han dado ninguna razón» al fin del refuerzo policial. No obstante, su interpretación es clara: «Todo obedece a una decisión política, todo estaba pactado y negociado».

Por un lado, explican desde este sindicato policial, «ceden ante los independentistas, nuestra presencia en Cataluña no es bien recibida». Por otro, sitúan este recorte «en un paso previo a culminar con grandes pretensiones como que la Policía abandone el edificio que ocupa la Jefatura Superior» en la Vía Laietana de Barcelona. Un objetivo que ha fijado en su agenda Esquerra Republicana de Cataluña (ERC), según ha anunciado su portavoz en el Congreso, Gabriel Rufián, en numerosas ocasiones.

«Incongruencia»

José María Benito insiste, además, en que esta merma en el personal se produce «en el peor momento posible». «Tenemos muchos frente abiertos. Entre ellos, el paso de la Junquera —la frontera catalana con Francia—, donde hay un tránsito importante de personas, teniendo en cuenta que existe una amenaza terrorista en Cataluña, o problemas de otra índole como son los disturbios que se producen en la comunidad autónoma», denuncia.

Desde Jupol, sindicato mayoritario de la Policía, aseguran que esta decisión les cogió «por sorpresa» y generó «descontento e incertidumbre entre los agentes». Su portavoz, Pablo Pérez, ha criticado que «esta anulación descuadrará todo el calendario anual de salidas previstas, trastocando servicios establecidos, e incluso generará problemas de conciliación familiar». 

Por otro lado, Jupol califica de «incongruencia» que desde el Ministerio del Interior se hable de declarar Catalunya como Zona de Especial Singularidad (ZES) para atraer a los agentes a este destino con determinados pluses dados dados los disturbios ocasionados los últimos años, «y ahora se reduzca hasta en un 35% los efectivos antidisturbios», critican. 

Cumbre de la OTAN

«Esta decisión supone un déficit de compañeros que no solo cargará de más peso laboral a los agentes de Barcelona, sino que pone en riesgo su seguridad en caso de problemas». Además, censura que «esta limitación no permitirá a la Unidad de Barcelona trabajar como lo hacían hasta ahora, con un margen de reacción para cubrir los eventuales actos o manifestaciones que terminaban con actos violentos ante la Jefatura de Via Laietana».

Otras fuentes consultadas por THE OBJECTIVE, en cambio, deslizan que la cancelación de este refuerzo en Cataluña puede deberse a la próxima cumbre de la OTAN, en Madrid. Un evento a donde, según las mismas fuentes, se destinaría a estos agentes en el marco del gran despliegue de seguridad que prepara el Gobierno desde hace semanas.