UGT pide «fuerza en las calles» el 1º de mayo para presionar a la CEOE y subir los salarios
El secretario general del sindicato da «unos días» a la CEOE para alcanzar un pacto salarial o «habrá una escalada de la conflictividad»
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, quiere que las manifestaciones de este 1º de mayo, las primeras que se celebran tras la pandemia, se conviertan en una demostración «de fuerza» de los trabajadores para no dar «ni un paso atrás» en las reformas de pensiones y del mercado laboral y para hacer que la CEOE acepte sus reivindicaciones salariales en la negociación colectiva.
«Me interesa que el Gobierno vea que hay músculo y fuerza en las calles y que ni un paso atrás. Y también que lo vean sus socios, los que apoyaron la investidura, para que no haya un trueque en política que impida que a los pensionistas se les suban las pensiones (…) Es importante que en las calles se visualice que vamos a pelear para que nadie toque estas reformas», ha afirmado el líder de UGT en una entrevista con Europa Press.
Pero no es el único mensaje que Álvarez quiere lanzar en las calles de toda España en el Día Internacional del Trabajo. También tiene un ‘recado’ para la CEOE: si no hay pacto salarial, habrá una escalada de la conflictividad en las mesas donde se negocian los convenios colectivos.
En este sentido, ha avisado de que la propuesta que llevarán los sindicatos a las mesas de negociación de determinados sectores, como el financiero o el energético, que están teniendo «beneficios que sonrojan», no será tan «moderada» como el planteamiento general que han hecho a la patronal, pues los trabajadores tienen que llevarse su parte «del pastel».
Así, para Álvarez, el 1º de mayo marca «un punto de inflexión» en lo que respecta al acuerdo de negociación colectiva con la CEOE, a la que da «unos días, pero no meses» para cerrar un pacto.
«Los sindicatos estamos en una posición muy moderada. Plantear aumentos de salarios del 3,5% como punto de partida, con una revisión salarial a final de año, es una posición muy moderada y eso ayudaría a que los efectos negativos sobre la inflación no se produzcan», defiende.
Llamamiento al gobernador del Banco de España
Y por ello, hace un llamamiento al gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, «que muchas veces ha hecho de portavoz de los intereses de las empresas, nunca de los trabajadores», para que públicamente salga a decir que la fórmula de los sindicatos «no incrementa la espiral inflacionista y permite salvar los salarios a final de año».
«Sería bueno que las autoridades que manifestaron en su momento que esto podría ser un factor inflacionista, sobre todo el gobernador del Banco de España, reconozcan que esta fórmula que planteamos no lo es», subraya el líder de UGT.
En todo caso, el dirigente sindical ha advertido a la patronal de que debe ser «plenamente consciente» de que el pacto de convenios «no es un capítulo cerrado» para los sindicatos, pues se trata del «motor» de la negociación colectiva en España, que facilita que los convenios se puedan negociar con tranquilidad y paz social.
«Si no se da esta situación, habrá una espiral de la conflictividad en España muy importante y no va a ser en septiembre. Será de manera inminente, en el momento en el que lleguemos a la conclusión de que no hay salida con la CEOE (…) Un escenario de conflictividad es lo que merece una patronal que no tiene ninguna sensibilidad con las clases populares que tan mal lo están pasando en este país», asegura Álvarez.
Así, los sindicatos sólo le dan a CEOE unos días para resolver el pacto salarial, el tiempo necesario para que las dos confederaciones acaben de cerrar con sus organizaciones cuál es el proceso y de qué manera se van a llevar adelante los procesos de movilización. La idea, asegura, es que la CEOE llegue a la conclusión de que «le va a salir caro no llegar a un acuerdo». Y avisa: «el nivel de movilización en España puede ser más importante de lo que algunos piensan».
«El país se arruina si no se suben las pensiones»
Álvarez espera que la asistencia al 1º de mayo un reflejo en las calles de estas reivindicaciones y también de celebración de todo lo que se ha conseguido, como la reforma laboral y la de pensiones. «Nunca hemos vivido un 1º de mayo con tantas conquistas en tan poco tiempo», subraya.
En este punto, ha confesado que le hubiera gustado que se hubiera producido antes de este 1º de mayo una «rectificación» por parte del PP sobre su negativa a apoyar la reforma laboral y de pensiones.
También en lo que respecta a las pensiones ha tenido palabras para la CEOE, cuyo presidente, Antonio Garamendi, abogó hace unos días por introducir un factor de sostenibilidad en las pensiones que no lleve el país «a la ruina».
«En este país nos tenemos que acostumbrar a no decir que se arruina el país. ¿Pero qué país se arruina?. «El país son los casi 11 millones de pensionistas que hay en España, para mi eso es el país, y si no subimos las pensiones los que se arruinan son los pensionistas. El país son las personas», defiende.
Por eso, hace un llamamiento a los pensionistas, pero especialmente a aquellos trabajadores que, gracias a la reforma laboral, han pasado de ser temporales a indefinidos, que salgan a las calles este 1º de mayo a manifestarse con los sindicatos y que recuerden que estas cosas «no caen del cielo».
Pero junto a todo ello, Álvarez ha indicado que este 1º de mayo «abre de par en par» otras reivindicaciones sindicales que hay que abordar este año comop el precio, las condiciones y las causas del despido, o la necesidad de mejorar la Ley de Prevención de Riesgos Laborales para incluir en ella los riesgos psicosociales, «que han irrumpido de una manera brutal» en el mundo laboral.