Curas casados y sacerdocio abierto a las mujeres: las propuestas de la Diócesis de Barcelona al papa de cara al Sínodo de Roma

Más de 200.000 fieles han participado en un proceso de reflexión sobre la Iglesia, que llegará al Vaticano a través de los obispos

La Conferencia Episcopal (CEE) analiza estos días las propuestas llegadas desde las 70 diócesis españolas de cara al Sínodo que se celebrará el próximo 11 de junio, y entre las que se encuentra la de la Archidiócesis de Barcelona, que propone un debate sobre la posibilidad del sacerdocio femenino y el celibato opcional de los sacerdotes.

El papa Francisco convocó este Sínodo 2021-2023 que pretende acoger las propuestas de las distintas Conferencias Episcopales, así como de movimientos de laicos y congregaciones religiosas y que concluirá en octubre de 2023, cuando tendrá lugar en Roma la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los obispos.

Antes, cada Conferencia Episcopal deberá recoger las aportaciones de sus diócesis en un proceso de «escucha y discernimiento» que concluirá con la presentación de una síntesis el próximo 11 de junio, propuestas que serán enviadas a Roma.

Entre ellas, la de la Archidiócesis de Barcelona, que dirige el presidente de la CEE, el cardenal Juan José Omella, y que, entre otras cosas, solicita que se abra «la posibilidad al celibato opcional o la posibilidad de acceso al sacerdocio de hombres casados». Además, el documento, elaborado a partir de la síntesis de todos los procesos de debate en el seno de parroquias y movimientos católicos del Arzobispado de Barcelona, pide una iglesia que abra la posibilidad a que las mujeres puedan ser sacerdotes.

Las propuestas llegarán al papa

«Todas las propuestas, incluida la de la diócesis de Barcelona, están siendo escuchadas y recogidas para elaborar la síntesis final y el ejercicio de discernimiento», ha dicho el director de la Comisión Episcopal para los Laicos, Familia y Vida, Luis Manuel Romero, en un encuentro con periodistas.

Esa tarea de síntesis la llevará a cabo el grupo sinodal de la CEE, entre quienes se encuentra Romero y el portavoz de la CEE, Luis Argüello, que analizan las propuestas y decidirán, «desde un clima de oración y pidiendo que el Espíritu Santo nos ilumine», las que formen parte del documento final. «Nosotros recogemos todas las propuestas que vienen, pero hay algunas cuestiones que no es que se eviten, sino que no dependen de nosotros ni de la Iglesia en España, sino que requieren una reflexión teológica y magisterial», ha explicado.

No obstante, ha añadido que, además de la síntesis, se enviarán a Roma todas las propuestas que lleguen de las diócesis.

Romero ha explicado que en este proceso han participado más de 13.000 grupos de parroquias y que han llegado también aportaciones de congregaciones religiosas, de monasterios, institutos seculares, movimientos y asociaciones laicales, miembros de partidos políticos, del mundo de la cultura y del arte, incluso de cárceles, donde se ha trabajado con mil personas entre voluntarios y presos. Entre todos, la CEE calcula que más de 200.000 personas se han implicado en este Sínodo, la mayoría de ellos laicos, mujeres y con una edad media de 55 años.

Fuente: EFE.