El CNI advirtió al Gobierno de que Marruecos buscaba presionar a España sobre el Sáhara con la crisis migratoria de Ceuta
Los servicios de inteligencia destacan que se trata de “una estrategia perfectamente planificada» y que apunta directamente al rey Mohamed VI
Los servicios de inteligencia destacan que se trata de «una estrategia perfectamente planificada» y que apunta directamente al rey Mohamed VI, según El País
El Centro Nacional de Inteligencia (CNI) advirtió al Gobierno de que la entrada de miles de inmigrantes de forma ilegal en mayo de 2021 a través de la frontera de Ceuta estaba relacionada con el “discurso agresivo” de Rabat que tenía como fin presionar a España para que cambiase de postura sobre la soberanía del Sáhara occidental, según ha desvelado El País este lunes.
Así lo contempla un informe de cuatro páginas de carácter reservado en el que se analizaba el estado de las relaciones con Marruecos después de la acogida humanitaria del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, en un hospital de Logroño para tratarse del coronavirus y al que ha tenido acceso el periódico.
El documento fue redactado el mismo día que se registró la crisis migratoria y recoge que el Ejecutivo marroquí buscaba “implicar directamente al Presidente del Gobierno”. Asimismo los servicios de inteligencia concluyeron que la entrada de miles de inmigrantes formaba parte de la estrategia de “presión” de Marruecos para que Madrid reconociera su soberanía sobre el territorio.
El medio destaca la existencia de un segundo documento, con fecha del 26 de junio, que alertaba sobre el mismo tipo de presiones y advertía que el fin era «presionar al Gobierno de España para conseguir un posicionamiento favorable a Marruecos en el contencioso del Sáhara Occidental”. El citado medio recuerda que justo diez meses después se producía el histórico cambio de posición por parte del Ejecutivo español respecto a ese territorio.
Una estrategia planificada
Según indica el primer informe, Marruecos inició “una estrategia perfectamente planificada y dirigida desde las más altas instancias del poder” que apunta directamente al rey Mohamed VI. “El monarca marroquí se implicó directamente en la estrategia al considerar que la decisión española fue aprobada por los niveles de decisión política más altos en nuestro país y estimó insuficientes las explicaciones recibidas”, revela el texto.
El CNI también señala a Fouad Alí el-Himma, consejero del rey Mohamed VI, como planificador de la estrategia, seguido del ministro de Asuntos Exteriores, Nasser Bourita, a los responsables del servicio de inteligencia exterior dependiente de las Fuerzas Armadas marroquíes y de la Dirección General de Vigilancia del Terrorismo.