El Gobierno se rebela contra la propuesta de Bruselas sobre el recorte del 15% del gas
«A diferencia que otros países, los españoles no hemos vivido por encima de nuestras posibilidades desde el punto de vista energético», ha afirmado Ribera
La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha anunciado que España «no apoya» la propuesta planteada por Bruselas de imponer reducciones de consumo de gas a los países de la UE en situaciones de alerta ante un posible corte en el suministro por Rusia.
En rueda de prensa, Ribera ha subrayado que España es «un país europeísta y solidario», pero ha asegurado que no se puede pedir al país «un sacrificio desproporcionado», ya que «a diferencia que otros países, los españoles no hemos vivido por encima de nuestras posibilidades desde el punto de vista energético. Defendemos los valores europeos, pero no podemos asumir un sacrificio sobre el que ni siquiera nos han pedido opinión previa», ha añadido la vicepresidenta.
Por ello, la ministra ha instado a los «socios» europeos a «debatir de forma abierta, transparente y respetuosa» sobre la mejor manera de apoyarse a este respecto.
De esta manera, Ribera ha respondido con rotundidad a la propuesta planteada este miércoles por la Comisión Europea de recortar un 15% su consumo de gas de forma voluntaria hasta la próxima primavera, una reducción que Bruselas quiere poder imponer de forma obligatoria en caso de alerta para la seguridad de suministro.
En concreto, este recorte sería desde el 1 de agosto del presente ejercicio hasta el 31 de marzo del próximo año e implicaría que administraciones públicas, hogares, propietarios de edificios públicos, proveedores de energía y la industria deberán tomar medidas para ahorrar gas.
Ribera ha advertido de que la propuesta de la Comisión Europea tiene consecuencias «desde el punto de vista económico, social, de impacto redistributivo y geopolítico», que son «suficientemente importantes para merecer un canal de escucha y participación de todos los estados miembros».
«No es correcto encontrarse con un menú del día ya diseñado»
«No discrepamos de los objetivos y del papel desde el punto de vista de la solidaridad, pero no nos parece correcto encontrarnos con un menú del día ya diseñado sin preguntarnos nuestras limitaciones alimentarias», ha aseverado.
Además, ha considerado injusto encontrarse con una «lista de deberes sobre la que no se nos has consultado y que acabaría beneficiando a terceros países sin ningún tipo de beneficio para otros países», ha afirmado.
En este sentido, ha destacado el papel «fundamental» que puede jugar España como «puerta de entrada» de más del 30% del gas natural licuado (GNL) a Europa y con unas infraestructuras preparadas para dar respaldo «a sus vecinos».
«Pase lo que pase» España no va a sufrir cortes de gas
Asimismo, Ribera ha dejado claro que, «pase lo que pase, las familias españolas no van a sufrir cortes de gas y de luz en sus casas» y se va a «defender la posición» de la industria española.
«España ha hecho los deberes en este ámbito, pagando más que muchos socios europeos», ha afirmado, añadiendo que el Gobierno «se resiste a la imposición de obligaciones por encima en términos de esfuerzo a lo que nos corresponde y se pide a otros socios comunitarios».
A este respecto, la vicepresidenta tercera ha indicado que España cuenta con una capacidad de almacenamiento de gas natural que se sitúa ya en más del 80%, mientras que el nivel del resto de Europa está en torno al 50%, así con unas reservas estratégicas de llenado de gas natural de hasta el 90%. «Hemos conseguido una posición que permite decir que la propuesta de la Comisión (Europea) no es ni la más eficaz, ni la más eficiente y justa».
Igualmente, puso en valor la solidaridad de España en materia energética, que en el último mes ha exportado a otros países miembros más del 20% del gas importado por el país.
De esta manera, ha asegurado que España irá al Consejo Europeo de Energía del próximo 26 de julio «a defender los intereses de todos los españoles con una propuesta solidaria, eficaz, eficiente y coordinada».
Ribera ha considerado que la propuesta realizada por Bruselas este miércoles puede ser admitida como «un punto de partida, pero no como punto de llegada», ante una falta «clara de diálogo, que debe ser corregida cuanto antes». «Lo primero que uno debe hacer cuando necesita apoyo y ayuda es trabaja con aquellos a quienes pide apoyo y ayuda», ha recalcado la ministra.
La hipótesis ni se baraja
Esta mañana la ministra había apostado por «el ahorro y la eficiencia» en el consumo, pero ha asegurado que el Gobierno no baraja la hipótesis de restringirlo a «ningún tipo de consumidor».
Ribera ha viajado este miércoles a Bilbao para visitar el proyecto de investigación, desarrollo e innovación «H2Sarea» flotante y asistir a la inauguración de la plataforma de ensayo para prototipos de energía eólica marina «DemoSATH».
En declaraciones posteriores a los periodistas, la ministra ha destacado que el Ejecutivo «está comprometido» con los consumidores, tanto domésticos como industriales. «España va a ser solidaria con el resto de Europa, pero nuestra solidaridad es mucho más útil si podemos hacer uso de nuestras infraestructuras para poder aportar gas al resto de los europeos, pero no a costa de unos consumidores domésticos e industriales que vienen pagando desde hace mucho una factura muy elevada, por ser precisamente una isla energética», ha puntualizado.
En este sentido, ha señalado que la capacidad de regasificación española representa más del 30% del total de la europea y, por lo tanto, España es «el principal puerto de entrada de gas natural licuado a Europa», lo que «se ha reflejado en facturas de consumidores domésticos e industriales de gas que, por tanto, no se merecen el dar restricciones».
El Gobierno apuesta por el ahorro
«Sí creo que hay que apostar por el ahorro y la eficiencia, sí creo que hay que buscar de qué modo se pueden sustituir unos consumos por otros, hasta donde se puedan sustituir, pero no consideramos la hipótesis de introducir racionamientos ni restricciones a ningún tipo de consumidor», ha manifestado.
Teresa Ribera se ha referido al plan de la Comisión Europea que propone que se recorte un 15% el consumo de gas frente a las amenazas de Rusia y ha dicho que tendrán que analizar cuál es el planteamiento concreto.
«Creo que hay una llamada al esfuerzo a todos los países, hay una llamada muy potente a la solidaridad. España es un país comprometido con la solidaridad, pero tenemos que ver cuál es la mejor manera de ofrecer solidaridad, que probablemente está más vinculada a la capacidad de utilizar nuestras infraestructuras para dar apoyo a los Estados miembros que dependían del gas, que llegaba por gasoducto», ha indicado.
En este sentido, ha recordado que España tiene «una gran capacidad de regasificación y también una gran capacidad de almacenamiento y reexportación a través de pequeños metaneros», y el Gobierno opina que los consumidores españoles, «más allá del esfuerzo que puedan hacer, no deben sufrir las consecuencias de algo por lo han estado pagando durante muchos años», su propia seguridad a aprovisionamiento.
Ribera afirma que Rusia dejará de suministrar gas a Europa
Ribera ha destacado que existe una «convicción generalizada de que, antes o después, Rusia va a dejar de suministrar a Europa» y ha apuntado que la UE, aunque hoy no ha adoptado sanciones al país ruso por la invasión de Ucrania, sí quiere prescindir de él como suministrador principal de gas, carbón, petróleo y uranio enriquecido.
Tras señalar que en la actualidad Rusia es un país fundamental para los suministros energéticos en Europa, ha recordado que no lo es «tanto para España» porque su volumen de importación de gas «es muy limitado y prácticamente».
Sobre el anuncio de Vladimir Putin de que reabrirá el gasoducto con Alemania, la ministra cree que «lo que ha hecho es ensayar con los europeos el chantaje energético». «Desde hace más de un año empezaron a reducir el gas almacenado o los flujos de gas que procedían de Rusia hacia Europa a través de los distintos gasoductos activos», ha dicho tajante.
En cuanto al Nord Stream 1 en concreto, ha subrayado que, «desde hace meses, se ha reducido el flujo en más de un 84%, es decir, está funcionando alrededor del 15%». «Ahora ha habido una parada programada por mantenimiento. Había dudas sobre si aquella parada programada diez días, que acaba hoy, sería permanente o si, en el supuesto de que vuelva a funcionar, va a seguir mandando gas en torno al 15% o si lo va a incrementar», ha aclarado.
Tras indicar que no tienen la respuesta, considera «muy probable que siga jugando con los volúmenes de gas que exporta hacia Europa».