La Xunta y el alcalde socialista de Santiago se suman a las críticas al plan de ahorro energético del Gobierno
El Gobierno gallego tacha de «estéticas» y sin consenso las medidas aprobadas por el Ejecutivo de Pedro Sánchez
El Gobierno gallego tacha de «estéticas» y sin consenso las medidas aprobadas por el Ejecutivo de Pedro Sánchez
El vicepresidente primero de la Xunta y consejero de Economía, Industria e Innovación, Francisco Conde, ha tildado este miércoles de «estéticas» y sin consenso las medidas anunciadas por el Gobierno para el ahorro energético, pero que, según ha recordado, son de obligado cumplimiento.
«Es un real decreto y, por lo tanto, de obligado cumplimiento para todos los destinatarios, ya sean administraciones públicas o sea el sector privado», ha explicado el conselleiro, después de la polémica surgida por el rechazo a este plan manifestado por la Comunidad de Madrid, que se plantea llevar la norma al Tribunal Constitucional.
Tras el mensaje ayer en Twitter de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso -«Madrid no se apaga»- el coordinador general del PP, Elías Bendodo, aseguraba este miércoles en una entrevista que entiende «el enfado y la decepción» de la líder madrileña ante la «imposición» de un plan energético que se ha aprobado «sin ningún tipo de consenso».
A través del consejero de Economía, la Xunta, gobernada por el PP, ha pedido al Ejecutivo central «responsabilidad» con las medidas que impone, y que atienda «las necesidades reales del sector privado, de los comercios y de las empresas y de los costes que van a tener que incurrir para adoptarlas». Conde ha lamentado que están «acostumbrándonos a una situación en la cual el Gobierno legisla a través del Boletín Oficial del Estado y no a través de las conferencias sectoriales, estableciendo diálogo con las comunidades autónomas y los sectores productivos». Ha mostrado su «sorpresa» ante unas medidas que la Xunta «desconocía» y que no fueron llevadas a la conferencia sectorial de Energía que tuvo lugar la pasada semana. Según Conde, tampoco fueron trasladadas al presidente del Gobierno gallego, Alfonso Rueda, en su reunión con Pedro Sánchez la semana anterior.
El alcalde de Santiago muestra «preocupación»
El alcalde socialista de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, ha admitido este miércoles que la medida del plan de ahorro energético que “causa más preocupación” en el Ayuntamiento es la obligatoriedad de apagar las luces de los escaparates de las tiendas y los edificios públicos, entre ellos la catedral.
En declaraciones a los medios, Bugallo ha considerado que apagar las luces de edificios como la Catedral de Santiago u otros de la zona histórica de la capital gallega redunda en “menor iluminación en determinadas áreas” de la ciudad ya que estas luces “forman parte de la iluminación pública”. “Y si se apaga lógicamente se produciría una situación que transmitirá una imagen de menor seguridad y de menor comodidad para las personas que están en la ciudad histórica, que son muchísimas”, ha señalado Bugallo, respecto a los vecinos y a los miles de peregrinos que está recibiendo Santiago en este verano.
Por tanto, ha dicho que estudiarán «este tema», que ya se está abordando “con el resto de las ciudades Patrimonio de la Humanidad», porque tienen la misma problemática que Compostela.
Fuente: EFE.