Albares enviará al diplomático de confianza de Pablo Iglesias de embajador a Uruguay
Coloca a este diplomático próximo al exvicepresidente en la región estratégica de Podemos. Santiago Jiménez será el segundo embajador cercano a los morados
Pablo Iglesias y Santiago Jiménez en la etapa del primero como vicepresidente del Gobierno. | Foto: Twitter de S.Jiménez
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, nombrará próximamente a Santiago Jiménez, el diplomático de confianza de Pablo Iglesias durante su etapa de vicepresidente del Gobierno, de embajador español en Uruguay, según adelantó la web especializada The Diplomat in Spain y confirmó THE OBJECTIVE en fuentes diplomáticas.
Jiménez fue director adjunto del Gabinete de Iglesias y luego ascendió a director con la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, hasta que en mayo renunció al cargo. Diplomático de carrera, ha pasado los últimos meses en la Agencia Española para la Cooperación Internacional y el Desarrollo (Aecid) y una vez que llegue el plácet de las autoridades de Monteviedo, ocupará su primera embajada. Aunque es experto en asuntos de Oriente Próximo, este diario ya indicó en junio que no se descartaba su desembarco en América Latina, región estratégica para los morados.
Además, se convertirá en el segundo diplomático de carrera vinculado a Podemos que Albares pone al frente de una embajada. Hace escasamente un mes, el Gobierno nombró embajador en la República Checa a Alberto Moreno, que había sido candidato de Podemos a la alcaldía de Majadahonda en los comicios municipales de 2019.
Cambio con la salida de Pablo Iglesias
Su sustitución en el equipo de Belarra se debió, según explicaron desde el ministerio, a cuestiones de reubicación interna de otros cargos. Y al hecho de que con la ministra al mando, Jiménez ya quedaba sin las tareas que le había encargado Iglesias. Jiménez dejó el ministerio escribiendo un mensaje de agradecimiento para sus ex compañeros y jefes. Recibió otros mensajes de despedida, lo que permitió ofrecer una imagen de salida pactada, sin venganzas o purgas de por medio.
Lo cierto es que Jiménez sabía desde hacía meses que iba a dejar el ministerio de Belarra. Con el paso atrás de Iglesias, había perdido a su referente y estatus: pasaba de ser mano derecha en asuntos internacionales de un vicepresidente, a miembro del equipo de la ministra de Asuntos Sociales. Aun así, conservaba el título de jefe de gabinete de la ministra Belarra, aunque la actual secretaria general de Podemos aspiraba a elegir a una persona de confianza al margen de los anteriores nombramientos de Iglesias.
Jiménez es un diplomático considerado cercano tanto a José Luis Rodríguez Zapatero como a Iglesias. Amigo personal del exsecretario general de Podemos, con quien compartió los estudios jurídicos, le acompañó en las principales misiones diplomáticas durante su año en la Vicepresidencia. El viaje más sonado fue el de la investidura del nuevo presidente de Bolivia, Luis Arce, en el que Jiménez formó parte de la delegación de Iglesias para dicha toma de posesión.
Este diplomático ingresó en el cuerpo en 2005 y desarrolló distintos puestos de carácter diplomático hasta la formación del Gobierno de coalición entre el PSOE y Podemos en enero de 2020. Entonces, el recién nombrado vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, le llamó para que fuera director adjunto de un Gabinete al frente del cual estaba el ex jefe de Estado Mayor de la Defensa Julio Rodríguez.
El nombramiento de Jiménez como embajador en un país iberoamericano como es Uruguay será, sin duda, bien recibido por Podemos, que se encuentra muy esperanzado con la llegada de formaciones izquierdas afines al poder en algunos países de la región, como Chile, Colombia, Bolivia o Perú, en los últimos tiempos, a los que podría unirse Brasil.
No obstante, la mayor experiencia diplomática de Santiago Jiménez está en Oriente Próximo,ya que ha estado destinado en las embajadas en Egipto y Emiratos Árabes Unidos -donde fue ‘número dos’-, además de haber sido encargado de negocios ad interim en la embajada de España en Damasco, entre 2012 y 2015, en los años más duros de la guerra en Siria, y residiendo una parte de ese tiempo, por razones de seguridad, en Beirut.
Además de haber trabajado entre 2008 y 2012 en Moncloa a las órdenes de Zapatero, este diplomático ha ocupado puestos relacionados con los medios de comunicación. Estuvo destinado en la Oficina de Información Diplomáticas (OID) en varias ocasiones, la última en 2019, como subdirector general.
Su experiencia le llevó a escribir el libro “Diplomacia y Periodismo. ¿Cooperación o competición?”, en el que analiza la influencia de los medios de comunicación en la política exterior. Cuando se produzca su nombramiento, sustituirá en la embajada en Montevideo a José Javier Gómez-Llera, que ocupa el cargo de embajador desde marzo de 2019.
