THE OBJECTIVE
España

Un grupo de madres pide una ley que proteja dar el pecho en público: «Si no lloras no mamas»

La organización Teta & Teta busca 500.000 firmas para llevar al Parlamento un anteproyecto de ley que recoja el Derecho a la Lactancia en Lugares Públicos

Un grupo de madres pide una ley que proteja dar el pecho en público: «Si no lloras no mamas»

Patricia Hernando y Raquel López, madres lactantes que han padecido incidencias por la ausencia de legislación en la materia, Marina García Canedo, portavoz de Teta & Teta y Violeta Assiego, jurista experta en Derechos Humanos. | Cedida

Dar la teta o amamantar a un bebé en el espacio público no está prohibido por ley, pero tampoco existe una norma que lo proteja como un derecho. Contra esta realidad se han rebelado un grupo de mujeres aglutinadas en la organización Teta & Teta, que han anunciado este martes su intención de recabar 500.000 firmas para llevar al Parlamento un anteproyecto de ley que recoja «las medidas normativas necesarias e integrales que protejan de manera efectiva el derecho a la lactancia natural frente a cualquier situación de discriminación, directa o indirecta, relacionada con esta, incluida la exclusión del espacio público».

La iniciativa se fundamenta en un estudio reciente realizado por LOLA MullenLowe y Lino Market Research Spain, que asevera que un 52% de las mujeres españolas ha tenido que ocultarse para dar el pecho en un lugar público; más de la mitad (el 63,5%) se han sentido juzgadas en este mismo contexto. El mismo informe revela que hasta a un 15% de las mujeres «les han llegado a llamar la atención activamente, invitándolas a taparse, a irse a un espacio más reservado, a un rincón, a una sala de lactancia o un baño. Incluso hay madres que han llegado a ser increpadas y vetadas».

Es el caso de Raquel López Tamames, madre de cuatro hijos increpada por dar el pecho a uno de ellos en una biblioteca de Burgos. «Mi hijo mayor de dos años me pidió teta y se la di con toda la normalidad del mundo; ya había dado de mamar en infinidad de sitios y nunca había tenido ningún problema», confiesa a THE OBJECTIVE. Pero en aquel instante la vigilante la reconvino porque no estaba permitido comer ahí. «Entiendo que no se pueda comer porque mancha y puede generar residuos, pero el bebé estaba mamando. Fue agresivo porque el niño con dos años entiende las cosas. Fue sorprendente porque jamás me había pasado algo así», lamenta.

Fue entonces cuando, junto a un grupo de madres, empezó a pergeñar la iniciativa. «Todos los años hay noticias de madres que han sido increpadas en una piscina o que en un restaurante han tenido que ir al baño a dar de mamar a su bebé. Es algo natural y hace falta educación. Es triste que tengamos que recurrir a una ley que proteja el acto, pero a muchas mujeres les ayudaría en momentos tensos», justifica López Tamames.

Desde la organización que impulsa la iniciativa, amparándose en el estudio antes mentado, aseguran que un 85% de las mujeres cree necesaria una ley que ampare lo que consideran un derecho. Y es que el 22 de noviembre de 2016 el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas (ONU) emitió un comunicado en el que reconoció la lactancia como «un derecho humano para bebés y madres que debe ser fomentado y protegido», e instó a los países a esforzarse para asegurarlo. En 2023, España sigue sin tener una legislación específica en este sentido.

A escala internacional, América Latina goza de un grado de protección sobre la lactancia materna sin parangón. En menor grado, países de nuestro entorno, como Francia o Reino Unido, también recoge este derecho en su legislación. Una tendencia que se irá consolidando por el globo, por cuanto el pasado mes de julio la Organización Mundial de la Salud (OMS) y UNICEF, en la celebración de la Semana Mundial de la Lactancia Materna, señalaron el amamantamiento como una herramienta clave para combatir los altos índices de desnutrición y malnutrición infantil. También ensalzaron sus virtudes para combatir enfermedades.

«El que no llora, no mama»

Marina García Canedo, portavoz de Teta & Teta, defiende en conversación con este medio que se precisa de «una legislación específica que blinde el derecho a dar de mamar en público»: «A día de hoy no se prohíbe, pero tampoco se avala. Este derecho estaría recogido dentro de la Ley Orgánica 3/2007 para la Igualdad Efectiva de Mujeres y Hombres, pero esta ni es específica ni está funcionando. Las mujeres siguen teniendo que taparse para protegerse de las miradas y de la incomodidad».

Para dar visibilidad a la iniciativa, este grupo de madres han colocado una escultura hiperrealista de un bebé en la Plaza del Museo Reina Sofía. Permanecerá ahí toda la semana. Y es que, tal y como denuncian sus impulsoras, «el que no llora, no mama».

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D