El portavoz de los obispos pide no vincular terrorismo y religión tras el ataque en Algeciras
Asegura que en este caso ha habido «motivación religiosa, de odio a la fe» pero pide «no demonizar» a ningún colectivo ni identificar el ataque con el islam
El secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Francisco César García Magán. | Carlos Luján (Europa Press)
El secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Francisco César García Magán, ha manifestado su «condena más absoluta» al ataque contra varias Iglesias en Algeciras, este miércoles, que ha dejado un muerto y varios heridos, y ha pedido «no demonizar» a ningún colectivo ni identificar este ataque con la religión islámica al igual que no se cayó en la identificación entre ETA y el pueblo vasco.
«En España tenemos la experiencia del peligro de demonizar colectivos. Cuando este país sufría el azote terrible del terrorismo no se podía caer, y se cayó en alguna ocasión, en la identificación entre terroristas y el noble, el leal y trabajador pueblo vasco. Cuando murió Francisco Tomás y Valiente el grito fue ‘vascos sí, ETA no’, no podemos caer en provocaciones, ni echar leña al fuego, ni caer en demagogias, ni identificar terrorismo con ninguna fe«, ha subrayado García Magán este jueves en un desayuno informativo de Nueva Economía Forum.
Por ello, aunque en este caso ha habido «motivación religiosa, de odio a la fe», el obispo ha avisado de que no se puede ni se debe «demonizar a colectivos o grupos en general». Además, ha recordado que la comisión islámica ya ha condenado los ataques, según señala Europa Press.
En este sentido, ha pedido dejar que las autoridades policiales hagan su trabajo y determinen las causas de esos «hechos execrables» y ha hecho un llamamiento a los cristianos para «procurar mantener la convivencia y no adelantarse a los acontecimientos».
El secretario de la CEE también se ha hecho eco de que habló la pasada noche con el obispo de Cádiz y Ceuta, Rafael Zorzona, y con el presidente de la CEE, cardenal Juan José Omella, que se encuentra en Roma, con quienes coincide en manifestar su «condena absoluta» por la violencia, que tiene «gravedad especial» cuando «se quiere justificar en nombre de Dios». «Es tomar el nombre de Dios en vano, sea con el nombre que sea», remarcó.
