Dos días de debate para una moción de censura sin posibilidad de éxito
Fuentes de la Ejecutiva Federal del PSOE dan por segura la intervención de Sánchez, con la duda de si intervendrán otros miembros del Ejecutivo
Fuentes de la Ejecutiva Federal del PSOE dan por segura la intervención de Sánchez, con la duda de si intervendrán otros miembros del Ejecutivo
El debate de la moción de censura presentada por Vox contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y encabezada por el economista Ramón Tamames, se celebrará el 21 y 22 de marzo sin ninguna posibilidad de éxito, ya que, salvo sorpresa, solo contará con el apoyo del partido de Santiago Abascal.
Aunque los detalles del debate se acordarán mañana en la Junta de Portavoces de la Cámara Baja, la previsión es que el martes 21 de marzo se dedique en exclusiva a las diferentes intervenciones y la votación se celebre el miércoles 22 de marzo, a una hora por determinar.
La presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha mostrado su absoluta flexibilidad con Tamames, de 89 años, para que pueda defender su programa e intervenir en el pleno desde el lugar del hemiciclo que mejor le convenga.
Según fuentes parlamentarias, Tamames ha consultado con la presidenta si podría intervenir sentado, sin tener que permanecer de pie mientras se dirige al hemiciclo, a lo que Batet le ha respondido afirmativamente, además de dejarle claro que le facilitará incluso varias opciones de ubicación para que elija la que le resulte más cómoda debido a sus problemas de movilidad.
Así, las posibilidades que se barajan y que se esperan aclarar a lo largo de esta semana son que hable desde un escaño, desde una mesa o un atril situado expresamente en la parte inferior del hemiciclo -como hace el portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique- o incluso que intervenga desde la tribuna de oradores.
Batet está incluso dispuesta a permitir a Tamames que escoja ubicación en función de sus necesidades o incluso que improvise, de manera que podría acometer su primer discurso desde la tribuna, a la que le puede resultar complicado acceder, para después tomar la palabra en las sucesivas réplicas desde la parte inferior del hemiciclo para evitar tener que subir y bajar las escaleras.
Además del emplazamiento del candidato, la incógnita que aún persiste es la hora a la que comenzará la sesión, posiblemente antes del mediodía, lo que obligaría al Gobierno a cambiar la celebración del Consejo de Ministros de los martes.
Uno de los factores que más complica anticiparse a la duración de la sesión es que ni el candidato ni el presidente del Gobierno tienen límite de tiempo, de modo que la extensión del debate depende en último extremo de cuánto prolonguen sus alocuciones, más allá de las de los portavoces, que sí están tasadas.
El pleno comenzará con la presentación del candidato, que correrá a cargo del líder de Vox, Santiago Abascal, sin límite de tiempo, según establece el artículo 177 del Reglamento del Congreso.
A continuación, y también sin limitación de tiempo, podrá intervenir el candidato «a efectos de exponer el programa político del Gobierno que pretende formar», prosigue el mismo artículo.
Los portavoces de los grupos dispondrán después de 30 minutos cada uno para intervenir también, con un turno de réplica de 10 minutos; y como siempre en los debates parlamentarios el jefe del Ejecutivo podrá hablar cuando y cuanto lo considere oportuno.
Fuentes de la Ejecutiva Federal del PSOE dan por segura la intervención de Sánchez, con la duda de si intervendrán otros miembros del Ejecutivo.
Aunque el líder del PP y jefe de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, no tiene previsto acudir a la sesión, si finalmente decidiera hacerlo, su condición de senador le permite ocupar un escaño o un puesto en la tribuna de autoridades; eso sí, en ningún caso podrá tomar la palabra.
Desde Vox, el vicepresidente de acción política del partido, Jorge Buxadé, ha destacado que lo más importante de la fecha de la moción de censura es que si Ramón Tamames es elegido presidente del Gobierno «convocará» elecciones generales el 28 de mayo, en coincidencia con las municipales y autonómicas.
Buxadé ha apuntado que las diferencias políticas entre Tamames y Vox no suponen ningún problema, sino todo lo contrario, ya que precisamente no buscaron «un candidato partidista afín» y prefirieron alguien que aúne el «punto en común» de «echar» a Pedro Sánchez de la Moncloa.
Quien no ha hecho mención explícita a la moción de censura ha sido el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que, eso sí, ha recalcado que el PP no va a contribuir a los objetivos de Sánchez.
«Para ayudar a Sánchez, que nadie cuente con el PP. No vamos a darle la oportunidad para que intente lucirse y hable de lo que le apetezca cuando de lo que tiene que hablar es de los problemas de los españoles y de los escándalos que le van cercando», ha añadido.
Desde los socialistas, la portavoz de la Ejecutiva Federal del PSOE y ministra de Educación, Pilar Alegría, ha señalado que afrontarán el debate «con el máximo rigor y seriedad».
«Un rigor y seriedad que nunca ha estado en esa agenda política de Vox. Usan este instrumento constitucional para impulsar su estrategia de ruido en las instituciones», ha alertado.
Unidas Podemos, por su parte, cree que el debate «va a ser una batalla» entre el PP y Vox y ha emplazado al Gobierno a defender los avances progresistas porque eso «es la mejor vacuna contra la extrema derecha».
El partido morado no ha decidido aún cómo planteará su posición en este debate aunque ya ha adelantado que su intención es no perder mucho el tiempo.
Fuente: EFE