Críticas a Sánchez por hacer "electoralismo con la vivienda": "20.000 pisos por aquí y 20.000 por allá"
Diferentes partidos políticos han cargado contra el presidente por promover en año electoral la creación de viviendas sociales
Diferentes partidos políticos han cargado contra el presidente por promover en año electoral la creación de viviendas sociales
Los grupos minoritarios del Senado, de distinto color político, han coincidido en acusar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de hacer electoralismo con la vivienda y han pedido concreción ante el anuncio de 20.000 nuevos inmuebles en terrenos del Ministerio de Defensa.
«20.000 pisos por aquí y 20.000 pisos por allá» de los que «no sabemos ni dónde ni cómo están», ha reprochado por ejemplo el portavoz de JxCAT, Josep Lluís Cleries, que le ha hecho ver al presidente que España está «a la cola de vivienda social» en la UE.
Desde Coalición Canaria, Fernando Clavijo le ha recordado las dificultades legales que acarrea construir viviendas públicas en terrenos de Defensa porque su uso, de interés para la defensa nacional, no se puede cambiar fácilmente, puede abrir una batalla de reclamaciones por parte de sus antiguos propietarios.
Por el grupo de la Izquierda Confederal, Carles Mulet, de Compromís, ha criticado que el presidente anuncie medidas «que pagan otros», advirtiendo que algunos territorios, como la Comunidad Valenciana, no podrán hacerlo porque el Gobierno «les continúa ahogando» con la infrafinanciación autonómica.
Desde Más País le han llovido más reproches a Sánchez por tardar más de tres años en promover la ley de vivienda, como le ha dicho el senador Pablo Gómez Perpinyà, que ha pedido al presidente que «se ponga las pilas» porque le necesitan para seguir promoviendo medidas progresistas.
De sacarse viviendas «de la chistera» cada vez que comparece ha acusado a Sánchez el representante de Geroa Bai, Koldo Martínez. «Parece usted de Bilbao», ha ironizado para denunciar que el Estado lleve 45 años sin hacer políticas públicas de vivienda cuando comunidades como Navarra «ya han hecho los deberes».
El senador Vicenç Vidal, de Més Per Mallorca, ha pedido que Defensa ceda gratuitamente el suelo, porque lo contrario supondría volver a pagar viviendas que «ya hemos pagado», como con la Sareb, «trilerismo» y «comprar armas» a través del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.
Por la Agrupación Socialista Gomera, Fabián Chinea ha respaldado los programas de vivienda, pero ha echado en falta un plan más específico que incluya plazos, dadas «las dificultades que entraña la enajenación de suelo» de Defensa.
Por parte del Grupo Parlamentario Democrático, Joaquín Egea, de Teruel Existe, ha preguntado cuántos pisos de los anunciados irán a parar a los territorios más despoblados tras denunciar que las viviendas de la Sareb no tienen «en cuenta los territorios de la España Vaciada».
El senador de Cs Miguel Sánchez ha centrado sus críticas en la nueva ley de vivienda, «redactada por ERC y Bildu» y que según los naranjas «protege a los okupas», es «intervencionista» y «reducirá más la oferta».
En el turno del Grupo Mixto, Vox ha pasado por alto el anuncio de vivienda. La senadora Pepa Millán ha denunciado que el presidente emplea el Senado para hacer propaganda y ha optado por pedirle cuentas por Marruecos, ante el que ve «sumisión». «Rabat manda y usted obediente gestiona», ha denunciado.
La senadora navarra Ruth Goñi no se cree que Sánchez quiera convertir la vivienda «en el quinto pilar» del Estado del bienestar porque, según ha señalado, lleva ya prometidas 220.000 viviendas en esta legislatura, incluidas las anunciadas hoy, «y no ha hecho apenas ninguna».
Alberto Catalán, de UPN, ha acusado a Sánchez de obviar «que la mayor parte de las competencias en materia de vivienda es de las comunidades autónomas», mientras que el senador del Partido Aragonés, Clemente Sánchez-Garnica, se ha centrado en dos cuestiones: el agua por el problema de la sequía que sufre España y la energía sostenible.