Los cárteles intentan implantar almacenes de 'cristal' en España ante la presión en Europa
La Policía ha tumbado un centro logístico en Alicante de un cártel mexicano que hasta ahora operaba en Holanda
Las dos toneladas de droga de las que se ha incautado la Policía. | EP
La amenaza es cada vez más real. Los grandes cárteles de droga están intentando establecerse en España ante el aumento de la presión policial en el centro de Europa y la guerra que existe por el control de los puertos marítimos europeos entre las organizaciones criminales. Su objetivo es abrir una vía española para dar salida, sobre todo, a drogas como la metanfetamina o crystal meth, aseguran fuentes policiales de Unidad Central de Droga y Crimen Organizado (Udyco). Las primeras pruebas de esta —casi— realidad fueron advertidas por los expertos de esta brigada central hace meses, con el incremento en el número de envíos de este tipo de droga a nuestro país.
Grandes cantidades de cocaína, de hachís… pero sobre todo, un aumento en la intervención de alijos de metanfetaminas y nuevas drogas. En el caso de las dos primeras sustancias, señalan las mismas fuentes, son más comunes porque tienen más cultura de consumo en España. Sobre las dos últimas, sin embargo, no la hay: lo que ya dejaba entrever que el negocio ilegal de este tipo de estupefacientes estaba empezando a meter la cabeza en territorio español. Una sospecha que, en cualquier caso, hace dos semanas la Policía Nacional terminó por confirmar con la desarticulación del mayor centro logístico de metanfetaminas de Europa en una vivienda de la localidad de Villena (Alicante).
En una operación conjunta de la Udyco y las unidades de Policía Judicial de Valencia y Tenerife, agentes intervinieron casi dos toneladas de metanfetamina en la citada vivienda, la mayor aprensión hasta la fecha, y detuvieron en la misma al cabecilla de la organización, un emisario del cártel mexicano de Sinaloa en España, encargado de supervisar la recepción, almacenamiento y distribución de la droga que, según estas fuentes, tenía como destino el centro de Europa: Reino Unido, Alemania, Polonia… y también países emergentes como Australia. Hasta hora, explican fuentes policiales expertas en esta materia, este cártel, gran importador de crystal meth, tenía su base de distribución, su centro logístico, en Holanda. La presión policial en este país, sin embargo, ha hecho que se hayan trasladado a España.
Canarias, origen de la investigación
La investigación se inicio a principios de 2023 cuando la Policía detectó la actividad de un grupo criminal, afincado en Tenerife, dedicado al tráfico de cocaína desde la península hasta el archipiélago canario. Las pesquisas permitieron arrestar a uno de los responsables de la estructura criminal y averiguar que realizaba el envío de la cocaína ocultándola en el interior de electrodomésticos que enviaban a la isla a través de empresas legales que desconocían el contenido del envío. El operativo policial, entonces, permitió la incautación de 24 kilos de cocaína, escondidos en lavadoras.
Tras este hallazgo, la Policía centró la investigación en identificar a los responsables del envío, que tenían como base una empresa de logística ubicada en la zona sur de Madrid, hasta donde se desplazaban integrantes de la organización criminal para hacer determinados envíos ocultos en electrodomésticos. Una vez identificados, realizaron distintas vigilancias y seguimientos y los agentes descubrieron que el responsable de la organización, el emisario del cártel de Sinaloa, operaba desde la provincia de Valencia y adoptaba importantes medidas de seguridad para no ser descubierto.
El emisario del cártel mexicano
El cabecilla de la organización utilizaba un segundo vehículo que actuaba como lanzadera en las operaciones de transporte para detectar detectar posibles controles policiales, así como dobles fondos en las furgonetas para ocultar la droga sintética, que guardaban empaquetada. Finalmente, el pasado 6 de mayo, los investigadores, tras distintas vigilancias, pudieron ubicar el lugar donde se encontraba el punto de almacenamiento y ocultación de la metanfetamina. Los agentes detectaron una furgoneta que se desplazó hasta una vivienda, en Villena, donde permaneció durante una hora y media.
Los policías interceptaron la furgoneta en la que observaron un sistema de compresores hidráulicos que permitían el acceso al suelo del vehículo donde se ocultaban un total de 224 kilogramos de metanfetamina. Tras el hallazgo se llevó a cabo una entrada y registro en el chalet donde se había aprovisionado el vehículo, en el que intervinieron agentes de los Grupos Operativos Especiales de Seguridad (GOES) para evitar cualquier tipo de riesgo. Allí, localizaron más de 1.500 kilos de metanfetamina y se arrestó al líder de la red criminal, responsable del cártel de Sinaloa en España, y a otras cuatro personas, de origen español y rumano, que trabajaban como transportistas.
La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones. De hecho, ahora, los agentes tratan de averiguar cuál era el principal punto de entrada de la droga a territorio español y si el cártel del Sinaloa tenía más ramificaciones en el país. La Policía no sabe cuánto tiempo exacto llevaba implantado el centro de almacenamiento y distribución de las metanfetaminas en la localidad de Villena. Las fuentes policiales consultadas, no obstante, aseguran que el asentamiento del cártel era reciente y descartan que fuese a establecer aquí un laboratorio aunque «si la organización trae aquí la droga, tarde o temprano algo siempre se acaba quedando», advierten.
