El cargo del SUP que ha dimitido es militante del PSOE de Gijón
El exresponsable de organización de Vizcaya es secretario de libertades públicas en la agrupación socialista de Gijón
El exresponsable del SUP tiene un cargo orgánico en el partido. | TO
El acuerdo para la realización de los polémicos cursos de defensa personal entre Desokupa y el Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha desencadenado la dimisión de un cargo provincial de la organización sindical en el País Vasco. Óscar González Berdejo, secretario de organización en Vizcaya, ha renunciado a su puesto y a su condición de afiliado después de que trascendiera el convenio entre el SUP y la empresa de Daniel Esteve para mejorar la formación de 30.000 policías nacionales. En una carta, Bermejo denuncia la deriva política del sindicato principal del cuerpo al haber firmado una alianza con una organización «que busca debilitar a un Gobierno legítimamente constituido».
La razón principal de su renuncia, prosigue, «es la deriva ultra que ha tomado el SUP en los últimos tiempos. Me duele profundamente ver cómo el sindicato que una vez fue la punta de Lanza en la formación en materia de seguridad en España, y que siempre se caracterizó por su independencia y su compromiso con los derechos de los policías, se ha convertido en un instrumento político al servicio de intereses personales». «Este pacto se produce en un momento político muy concreto. Me hace pensar que algunos responsables sindicales están utilizando la organización en beneficio de su ideología», insiste el ex-responsable provincial en la misiva, publicada por eldiario.es.
En el PSOE de Gijón
La marcha de Óscar Bermejo del SUP ha sorprendido en algunos sectores policiales, pero aún más el motivo de su marcha, alegando la falta de independencia política del sindicato, un extremo que niegan tajantemente desde el sindicato. «Nosotros somos quienes en muchas ocasiones disentimos de muchas declaraciones de Daniel Esteve, pero si tiene un proyecto ambicioso para la formación policial, no entiendo por qué debemos rechazarlo. Solo pensamos en lo mejor para los compañeros», señalan.
Otras fuentes policiales, en cambio, advierten que el exsecretario de organización de SUP Vizcaya no es precisamente un ejemplo de neutralidad política. Es militante del PSOE en Gijón (Asturias), tiene un cargo orgánico en el partido y «es una persona muy próxima a la delegada del Gobierno en Asturias, Adriana Lastra», advierten las mismas fuentes a THE OBJECTIVE. En abril de 2022, integró la lista del político Monchu García que ganó la candidatura a la Secretaría General de la Agrupación Socialista de Gijón (Asturias), según publicó El Comercio.
Actualmente, según reza la web del PSOE de Gijón, el policía nacional integra la Ejecutiva Municipal del partido socialista como secretario de libertades públicas. Óscar González Berdejo es «graduado en Criminología por la UNIR, máster en Análisis y Prevención del Crimen por la Universidad Miguel Hernández, actualmente doctorando en Criminología en la Universidad de Granada. Desde 1993 presta servicio en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y es Secretario de Organización del Sindicato Unificado de Policía del País Vasco», señala la página.
«Un asunto sobredimensionado»
El secretario general del SUP en Euskadi, Mariano Rodado, ha considerado, en declaraciones a Efe, que la dimisión del cargo en Bizkaia es un «asunto personal, que se ha sobredimensionado». Ha rechazado la acusación de «deriva ultra» hacia el sindicato, y ha defendido que nunca ha tenido ningún color. Según ha explicado, el acuerdo alcanzando con Desokupa «también le ha sorprendido porque además la institución policial cuenta con «profesionales de sobre y no necesita buscar formación fuera», pero, ha insistido, «si hay algo que aclarar, se hará de puertas adentro».
El anuncio del acuerdo entre Desokupa y el SUP ha desatado toda una cadena de críticas tanto en el seno de la Policía como en el terreno político. Principalmente por el perfil de la empresa, dedicada a la desokupación extrajudicial de viviendas, y sus dirigentes, vinculados a la extrema derecha y cuestionados por sus métodos de trabajo. Sin ir más lejos, el pasado lunes Sumar ha llevado al Congreso el convenio firmado y ha pedido la ilegalización de la empresa privada «por realizar afirmaciones xenófobas, fascistas y actuar vulnerando la legislación vigente y los derechos humanos».
La polémica, no obstante, surgió cuando la secretaria del SUP, Mónica García, afirmó el domingo que este curso sería «homologado y puntuable». Horas después, el Ministerio del Interior señaló que la formación no sería reconocida por la Dirección General de la Policía. Los sindicatos tienen un convenio firmado desde hace años que les permite dar formación externa a sus afiliados. No obstante, es la Policía quien después decide si darle validez para que los agentes puedan mejorar su expediente y optar a ascensos. No será en este caso. De hecho, la cartera Grande-Marlaska estudia la apertura de un expediente para analizar la posible impugnación del acuerdo si no conculca los valores democráticos.
